Mi prometida » Jensoo

dieciséis

Con ropa más informal y zapatos más cómodos, pasearon por la Sexta Avenida. Aquí, entre la multitud anónima de neoyorquinos, no había razón para tomarse de las manos y fingir ser una pareja, y Jennie extrañaba la mano de Jisoo en la suya tanto como extrañaba el anillo de compromiso falso en su dedo.

¿Era esto lo que pasaban algunos de sus colegas después de sumergirse en un papel durante meses? Pero ella había sido la falsa prometida de Jisoo durante sólo ocho semanas, a pesar de que de alguna manera se sintió más tiempo.

−Entonces, ¿a dónde quieres ir?−, Preguntó Jisoo. −Tú escoges.

Jennie apreció a Jisoo, la fanática del control, dejara que la elección dependiera de ella. Todavía no tenía hambre, así que trató de pensar en otra cosa que pudieran hacer durante una hora, algo menos romántico que dar un paseo por High Line. Una repetición del casi beso de anoche definitivamente estaba fuera, por lo que una actividad que gritara 'dos amigas jugando a ser turistas' estaba en bien.

Ella se revolvió el cerebro, pero todo lo que podía pensar eran actividades para parejas: remar en un bote debajo del Puente del Arco de Central Park, un paseo en carruaje o una vela al atardecer hacia la Estatua de la Libertad.

Una vista a su izquierda la ayudó a salir. −¿Qué tal el Empire State Building?− Ella señaló el rascacielos. Eso debería ser seguro. No había nada romántico en las largas colas que tendrían que enfrentar para llegar a la cima. −¿Te gustaría subir a la plataforma de observación?

−¡Sí!− Jisoo dio un pequeño salto inusual que hizo reír a Jennie.

Le encantaba ver a la mujer generalmente controlada tan entusiasta y despreocupada.

En lugar de la espera poco romántica que Jennie había imaginado, Jisoo sacó su teléfono y les consiguió boletos VIP que les permitieron saltar al frente de las líneas. Pronto, estaban subiendo al ascensor hasta el piso ochenta y seis.

–Siento que esto es Love Affair–, dijo Jisoo.

Jennie la miró fijamente. −Uh, ¿disculpa?

–La película de 1939, ¿sabes? Dos amantes potenciales acuerdan reunirse en el Empire State Building seis meses después de encontrarse en un crucero de lujo. El final de Sleepless in Seattle se inspiró en esa película.