Hongjoong un chico cambiaformas comienza a escribir cartas hacia su ex pareja, debido a que siente que es lo correcto despues de todo lo que ha pasado el solo. El hecho de ser semi sordo ha arrasado con su vida y carta a carta habla de su vida, de s...
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Estaba jodido, eso podría asegurarlo, aún no terminaba ni el primer semestre y tres de sus maestros ya le habían sugerido que buscara un tutor si quería pasar de manera tranquila el semestre. Caminaba de manera rápida por el campus de su universidad de comunicación intentando llegar lo más rápido posible a la cafetería y poder llorar en brazos de su mejor amigo.
Se golpeó con varias personas mientras pasaba se sentía algo decepcionado de sí mismo, pensaba que estaba haciendo las cosas bien aunque según sus maestros no era así, al llegar a la cafetería visualizo a su mejor amigo y corrió hacia sus brazos. - Yuyu~ - Lloriqueo metiéndose entre sus brazos y sintiendo como su mejor amigo comenzaba a acariciar su cabello.
- ¿Hongjoong? ¿Que paso? - Pregunto una vez que ya que su amigo pelirrojo se había dejado de temblar y lloriquear. El de baja estatura se tardo en contestar debatiendo si debía decirle al menor debido a que siempre habían tenido ciertas expectativas de él y el que le estuviera yendo mal tal vez podría ocasionar que el de cabello azulado se alejara poco a poco de él
Suspiro negando levemente mientras se alejaba del alto y le sonreía con calma. - Un mal día, supongo. - Pasó su lengua por su mejilla interna debido a que había levantado la mirada posándose en el reloj de la cafetería, uno de sus maestros le había agendado una con "el mejor tutor" según él y faltaba menos de veinte minutos para eso.
Miro al menor ahí mientras este comía apresurado, era muy tierno aunque no se atrevería nunca a decírselo ese tipo de cosas arruinarían su amistad según el, saco de su mochila un paquete pequeño de galletas y las comió con lentitud, su estómago estaba cerrado por los nervios y para cuando volvió a subir la mirada al reloj le quedaban cinco minutos para llegar a la biblioteca.
- ¡Mierda! - Soltó de golpe sorprendido mientras se atragantaba con una galleta. - Debo irme, Yuyu.- Se levantó veloz dejando un beso en la mejilla de su mejor amigo y corrió hacia la biblioteca sin esperar nada del contrario. Al llegar al lugar un chico de estatura mediana y cabello rubio esperaba en la entrada. - ¡Hola! ¿Eres HongJoong? - Preguntó con tono alegre y un pequeño puchero en sus labios sin saber la razón de este último el de cabello rojo asintió bajando la mirada ya que era obvio que ese chico era mayor que el. - Soy San, un gusto.- Volvió a intentar el rubio estirando su mano.
El menor la estrecho por unos segundos y después la retiró debidos a sus nervios, ambos se adentraron a la biblioteca sentándose en una esquina para poder hablar con un tono moderable y no molestar a los lectores. Hongjoong aun luchando contra su orgullo le hablo de lo que se le dificulta al de mirada felina, porque si San o Choi San como se volvió a presentar era como un pequeño gatito. Después de un tiempo recibiendo explicaciones del rubio de la nada un chico de pelo castaño llego a la mesa haciendo un pequeño escándalo. - ¡Choi San! Dijiste que me acompañarias en este receso para ensayar la presentación que dare en unos dias, ¡no es justo me dejaste barado! - Grito en susurro la mayor parte del tiempo haciendo que Hongjoong se crispara, ¿quién era él? ¿ y por qué estaba interrumpiendo algo que no le correspondía? Bufo llamando la atención del castaño y por la cara de asombrado que tenía no lo había notado en la mesa.
- ¿Quién es el? - Le pregunto el por el momento desconocido a San, el rubio suspiró negando y lo presento. - Mingi es Hongjoong, el chico al que le daré tutorías. Hongjoong, él es Mingi, mi mejor amigo...
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