"Eres mi cielo y mi infierno" 🧛❤🧛♂️

Capítulo 36 "Secuestro"

First lo había llevado a ese lugar apartado, sus intenciones eran que Joss se encargara de él. Al llegar lo sentó en una silla y lo amarró, él aún estaba inconsciente.

Joss: ¿Respira?

First: Claro que sí... ¿Quién te crees que soy? – se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la salida.

Joss: ¿Te vas? ¿No me ayudarás?

First: Lo que hagas con él de ahora en adelante es asunto tuyo, yo me encargaré de Vachi – y se fue.

Joss pasaba sus manos por el rostro de Win acariciándolo suavemente, se mordió el labio. Se veía tan hermoso, tan frágil e ingenuo. Eso hacía aumentar la lívido de Joss, sus pensamientos pecaminosos e inmundos inundaron su mente. Le lamió el rostro, pensó que era tan delicioso, quería probarlo todo, comenzó a acariciarle los brazos y dibujarlos con sus dedos, su mirada parecía traspasarle la ropa. Lentamente comenzó a desabotonarle la camisa, necesitaba saciar esa sed, quería ver ese cuerpo frágil desnudo, poseerlo y perderse en él, tomarlo y hacerlo suyo. Su ser no estaría tranquilo hasta que Vachirawit no le rogara, no llorara por lo que estaba a punto de perder.

La idea al principio era sólo secuestrarlo y hacer pasar un mal rato al Conde, pero verlo ahí, tan hermoso y a su merced, Joss no se pudo contener, sus bajos instintos se estaban desatando y quería saciarse.

Estaba tan desquiciado por poseerlo que simplemente terminó rompiendo la camisa, Win aún no recuperaba la consciencia, tocó sus pezones.

Joss: Tan hermoso, Vachirawit tiene suerte de tenerte, pero ahora – lamió uno de ellos- vas a ser mío.

Siguió toqueteándolo, su entrepierna reaccionó, por esta misma razón descuidó todo a su alrededor, estaba tan perdido en la belleza de Win que no supo nada de lo que pasó después.

Una densa neblina cubrió el lugar, comenzó a hacer frío, Win tirado en la silla casi recuperando la consciencia empezó a balbucear.

Win: Vachi, Vachi... amor... - iba y venía a la consciencia.

Joss intentó callarlo poniendo su mano sobre sus labios. Animales se sintieron por todos lados, aullidos, maullidos, chirridos, silbidos, trinos, etc. El ambiente se enrareció, un escalofrío recorrió su espalda y con cierto temor comenzó a mirar a su alrededor. Empezó a sudar frío y su sangre se heló.

Joss: ¡Mierda Win! ¡Cállate!

De pronto todo quedó en silencio y sintió su cuerpo entumirse, una mano se posó en su hombro y su asombro fue mayor.

Joss: ¡¿Qué carajos haces acá Saint?!

Saint: ¿Me extrañaste? Aw... que ternura ¿Cierto Gun?

Sus dedos se hundieron en el hombro de ese hombre, casi le crujieron los huesos e hizo una mueca de dolor.

Joss: Saca tu mano asquerosa de mí.

Saint: Verás... eso no va a suceder, ya que tú no quitas las tuyas inmundas de él – señaló a Win.

Joss: ¿También lo quieres? – dijo con sarcasmo.

Saint: Pobre imbécil, no sabes lo que dices – se rio fuertemente- yo que tú hago lo que te digo o no respondo por lo que te va a pasar...

En ese momento cientos de murciélagos llenaron el lugar, el frío se hizo casi insufrible, y de entre la espesa niebla aparece un animal. Un lobo casi babeando, sus ojos color rojo lo miraron fijamente, en ese momento el miedo, la ansiedad y el pánico se apoderaron de su cuerpo, Joss comenzó a orinarse y su cuerpo temblaba sin su permiso, sintió que sus rodillas se doblaban por sí solas y su corazón amenazaba con salirse de su pecho, casi no podía respirar, el pánico lo tomó por completo.