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Por fin todo parecía como antes, normal, tranquilo y algunas veces insoportable.

-wey, ¿hiciste la tarea? -Mía me preguntó.

-ME LLEVA, NO LA TERMINE. - Al parecer Lucía había escuchado de la tarea.

No pude evitar reír. -Ahí esta, copien.

-Te amamos. -dijeron Lucía y Mía.

-lo sé. -Respondí mientras les daba una sonrisa.

De repente escuchamos que venían hacia nosotras Alex y Daniel.

-Holaaa... ¿Qué hacen aquí? -Preguntó Daniel

-Yo ando descansando, ellas están haciendo la tarea de la próxima clase. -Conteste.

-¿Y las demás? -Pregunto Alex

-Creo que están viendo que comer. -Mía contestó aún concentrada en la tarea.

-Bueno... Aquí nos sentaremos por lo mientras. -Dijeron Daniel y Alex al mismo tiempo mientras se sentaban.

Pasaron algunos minutos, yo estaba platicando con Lucía, mientras ella terminaba su tarea, yo jugaba con su cabello y le daba algunos besitos en la mejilla, lo que hacía que se sonrojara.

-Iiiiih, vivan las novias. -Dijo Daniel mientras reía.

Lucía le enseñó el dedo del medio mientras me daba un beso... Ya había terminado.

Al voltear a ver a Alex y a Mía, vimos que andaban platicando mientras Mía hacia la tarea... Se veían con una conexión que siempre han tenido.

-Madres... Se ven lindos esos weyes, lo malo de esto es que también mi hermano esta que se muere por ella. -Nos dijo Daniel casi susurrando a Lucía y a mi.

-Lo sabemos... Ellos dos siempre han estado enamorados de ella, la verdad es que yo pensé que mientras no estaba Alex aquí, ella estaría con Emilio. -Dijo Lucía.

-No, ella aún extrañaba a Alex. -Conteste.

-¿qué nos ven? -Preguntó Mía fingiendo seriedad.

-¿somos sus payasitos o qué? -Le siguió Alex.

Daniel, Lucía y yo solo les enseñamos el dedo de enmedio mientras reímos.

-Ya llegueeee. -Tania había llegado. -Estaba haciendo unas cosas con la maestra de geometría.

-No te preocupes... ¿Sabes donde están los demás? -Pregunto Daniel.

-Vi a Emilio, estaba con una chica... Las demás no sé.

-Ay ese wey. -Dije yo.

-¿Me acompañan a ir por algo de comer? -Dijo Tania.

-Vamos... Mía esta haciendo la tarea y al parecer Alex le está haciendo compañía, solo vamos los cuatro. -Dijo Lucía.

Nos levantamos y nos dirigimos hacia la cafetería para que Tania pudiera elegir que comer, al regresar vimos a Mía y a Alex... ¿BESÁNDOSE?

-NO MAMES, NO MAMES, NO MAMES. -Daniel se veía impactado, le tuve que callar la boca para que no se dieran cuenta de que los estábamos viendo.

-Ya se habían tardado. -Dijo Tania

-No mames... Wey... -Estaba impactada.

-estoy impactada. -dijo Lucía.

-Emilio ve esto y se nos va al otro mundo. -Dijo Daniel.

Mientras Daniel decía eso vimos como Emilio se dirigía hacia nosotros. -PINCHE DANIEL, LO INVOCASTE. -Dije.

Tratamos de hablarle para distraerlo, pero fue demasiado tarde.

-Valió madre. -Dijo Lucía.

-Ya valió una chingada. -Dije yo.

-MI HERMANO. -Dijo Daniel.

Al notar nuestra presencia, Emilio solo se nos quedó viendo y se volvió a ir.

Al parecer Mía y Alex notaron nuestra presencia y por fin pararon.

-Ya era hora. -Dijo Tania.

-Si... Pinche beso de dos horas. -Contestó Daniel mientras reía.

-NO HABLABA DE ESO... si no que ya era hora de que ustedes se besaran. -Dijo Tania.

-Pinche tensión que tenían. - A completo Lucía.

-Este... Yo... Nosotros... Digo... Lila ven. -Mía estaba muy nerviosa.

Me acerque a Lila y la ayude a levantarse. -Luego hablamos Alex... Ven Lila vamos a hablar.

Al parecer esto ya era serio.


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