Bella y Bellier

EXTRA - Un hada sola

Si todo se resuelve con un el mover una varita, existirán mas varitas que soluciones.

En el reino el cielo se torno rojizo, las nubes se aglomeraron. El rey en su trono sonreía ante el desastre al igual que Ainna por fin pudo ver la sangre que su alma anhelaba o no era ella quien lo deseaba, por que siente ese vació tan extraño, por que sus ojos ya no son rojos y solo siente que fue manipulada, utilizada para ser descartada.

-¿Por qué? -es lo único que sale de sus labios mientras se quita la tiara, solo sus dedos quedaron agujereados, su cabeza quedo con líneas para demostrar su autodestrucción.

-Yo se la razón -escucha esa voz dulce que por años desdeño sin conocer el por que -fuiste poseída por el espíritu de la sangre el aprovecho la iniciación para tomar tu alma.

La iniciación de las hadas también es conocida por el hecho de crear antihadas. Llamados seres de sangre.

-¿Como? -solo esa palabra sale, ella sabe que deber ser cierto. Ahora su mundo posee diferentes tonos no como antes que siempre era gris y negro.

-No lo se exactamente, ello solo tu lo sabes. Pero tengo una teoría -la mira fijamente al mismo tiempo que sus pasos avanza para alcanzarla. A solo pasos de ella Esther demuestra un par de alas translucidas que rodearon a la chica de cabellos blancos -enserio te extrañe -la besa con ternura antes de abrazarla.

Ainna esta en shock, pese a ello su mente le recuerda el día en que escucho al rey decir que venderá a una de las hadas, eso hizo que en su iniciación odiara a todos y al escuchar un murmullo desquiciado acepto después de ello su mundo se oscurece, se esconde de los humanos esperando la forma de encontrar la decadencia para todos, que la sangre bañara el piso y que los humanos solo encontraran la felicidad en buscar la muerte.

-Nanna, no me extrañaste -reprocha.

-Te extrañe, no sabes cuando -le devuelve el abrazo, justo ese día la evito en busca de que nunca pudiese oscurecer el corazón de la persona que ama -puedes perdonarme.

Las gotas frías traspasan la tela negra, no dicen nada casi como en un acuerdo tácito.

-Pero sabes que soy muy lista -se autoalaga, por lo que aunque en este mundo no exista un futuro para nosotras, en otro seres felices. Como le dicen a esto un Bibiti babiti bu -del rosal sale una carta.

"Carta única -retroceso"