1- La vida que Dean merece

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"Conocerte fue el destino ... Convertirme en tu amigo fue una elección ... pero no tuve control cuando me  enamoré de ti".
Teresa Conroy 

Capítulo 1
La vida que Dean merece

Dean Winchester era un alma libre. No tenía ningún apego a nada. 

¿Amigos ? ¿Por qué tener amigos cuando eres tu mejor amigo? Además, los amigos necesitan tiempo. Y a veces dinero. 

¿Amantes ? Nunca dos veces con los mismos. 

¿Trabajo ? Todavía esperando el perfecto.

Dean había aprendido desde que era un niño que el dinero y la apariencia hacían girar al mundo. Es por eso que siempre estaba tratando de lograr ambos. Tenía la apariencia, muy buena apariencia. ¿Y el dinero? Seguía trabajando en eso.

Otra cosa que Dean había aprendido era que la independencia era el primer paso. Se fue de su casa a los dieciocho años y desde entonces era absolutamente autosuficiente.

Dean había perdido a su padre cuando era un niño y su madre había muerto unos años atrás. Dean no podía recordar bien ... ¿tal vez cinco ? Fue antes de que la esposa de su hermano diera a luz a su tercer hijo. Maldita sea ... se multiplicaron como conejos. ¿Cómo se llamaba ella? Saileen , Helen ... algo así.

A veces Dean sentía que debía ir a visitar a su hermano. Pero habían dejado de hablar entre ellos después de esa horrible pelea. Esa era una piedra pesada en el corazón de Dean, y trataba de empujarla hacia abajo.

Era un tipo muy inteligente. Tenía un título en publicidad y era muy bueno en eso. Su sueño era convertirse en director ejecutivo, un director ejecutivo poderoso y rico de una gran corporación multinacional. Sí. Las apiraciones de Dean Winchester eran grandes.

Dean era un gran amante. Decidía a quién amar y cuándo. Pero a veces no salía bien… como aquella noche, en la que un paso en falso lo llevaría a su verdadero destino.

- ¡¡Manténgase alejado de mi esposa !! - El hombre gritó y saltó por la puerta. Dean estaba en la cama con una hermosa mujer. Estaban desnudos.

- ¡Carl! - Gritó la mujer tapándose los pechos con la sábana. Dean volvió su rostro hacia ella y luego hacia el hombre que ahora estaba más cerca.

- ¡Carl, esto no es lo que piensas!-  Dean levantó ambas manos como un límite y el hombre solo gruñó. 

Carl corrió al armario y agarró una pistola.

Dean saltó de la cama:

- ¡Mierda! ¡Habla en serio!

El Arquitecto Del Destino (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora