𝑰𝑽

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-No funcionara -Kakuzu volvio a repetir, recargado en un extremo del auto ya harto de la situación-

Habían pasado ya un par de horas y el auto simplemente no podía avanzar, Kakuzu junto a Deidara estuvieron intentando que el vehículo andara pero todos sus esfuerzos fueron en vano pues ¿Como avanzaría sin una rueda?.
Primero intentaron con lo primero que les vino a la mente; colocarle la llanta de repuesto aunque esta fuera más pequeña que las demás. Luego probaron con empujar pero al igual que la primera idea está fue des hechada al ver que los resultados no serían para nada favorecedores.

-No me pienso quedar aquí -afirmo Hidan-

-No eres el único Hidan -la pelimorada volteo hacia atrás donde los demás que les acompañaban estaban fuera del auto, unos recargados y otros un poco lejos-

°•°×°•°
-

La espera para la solución de su problema se hacia cada vez más grande, tanto, que terminó por aburrirle

Naruto se encontraba recargado en la cajuela del segundo coche, el cigarrillo en su mano daría mucho de que hablar más solo el tenia ese conocimiento de su hábito, el humo no era problema el lugar donde estaba era alejado de los demás y el aire cooperaba con el pues todo terminaba llendose asia alguna parte donde el olor no podía ser perceptible para nadie.

-¿Cuanto tiempo crees que estaremos aquí? -se oyó una voz recien llegada a lado de el-

El melifluo en la voz del doncel era atrayente así como sus fracciones, tenía un cierto toque de sensualidad, cabello hasta los hombros de un tono entre rojizo y morado que no sabría descifrar bien que color sería, sus ojos eran de un color verde opaco que al ser puestos a la luz del sol se veían hermosos.

-Tranquilo que no diré nada -dijo al ver que el rubio no contestó a su pregunta al verse descubierto, con una sonrisa coqueta metió mano en el bolsillo de Naruto y sacó otro cigarrillo- Fumar es malo -le apunto mientras sostenia el encendedor-

-Ser complice también -Susurro acercandose, quitandole el pequeño objeto-

Una risilla salio de los labios del doncel, le encantaba poder coquetear y que le siguieran el juego al igual de poder sentir algo que reconocia como limerencia. Si ese varón era severamente atractivo, cuerpo trabajado, cabellos rubios, ojos azules cual mar salvaje y una personalidad seductora y divertida.

-Es más divertido así -Contesto acercandose aun más-

-¿Por que estas aquí?. Sheider -Pregunto con curiosidad-

-Me gustan los desafíos, y tu rubio eres uno muy tentador -susurro de la forma más honesta y sensual posible-

-Se agradece la honestidad -Naruto lo encontró atractivo y sensual físicamente, más sin en cambio había algo que lo detenía- No gracias, quiero conservar mis dientes -Bromeo ya que la expareja de aquel doncel era un varón que practicaba el boxeo-

-Tienes miedo -cuestiono-

-Tengo un sexto sentido -dijo mientras exhala el humo del cigarrillo- No estoy interesado -vio como el doncel se acercaba a él para luego susurrar-

-Seguro que puedes cambiar de opinión -dijo para luego caminar-

-Puede que este mejor si no nos alejamos demasiado del grupo -Naruto trato de convencerlo al ver como cruzaba la línea amarilla que dividía la carretera del bosque-

°•Infierno por Obsesión•° 《ItaDei》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora