Capítulo 5

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Bostecé estirando todo mi cuerpo con fuerza, me dolieron algunas pequeñas partes del cuerpo y me ardió la espalda...otra noche alocada...pero no demasiado disfrutada; desde lo sucedido con Andrew mis noches no eran iguales, habían pasado ya tres semanas desde el último encuentro y el placer no eran tan intenso con otras personas como solía ser antes...además ya no miraba a Ava de la misma manera, con las mismas intenciones...se me habían terminado las ganas de intentarlo con ella.

Me levanté revolviéndome el cabello, suspiré y empecé con mi rutina de todos los lunes por la mañana, tras ello salí encontrando a Marcus como siempre fuera del edificio de mi departamento.

-Deberías decirle a tus amiguitas que ya no te dejen marcas en el cuello- me dijo el grandulón.

-Nah, no hay necesidad, me gusta que lo hagan- respondí con una sonrisa acomodando mis gafas.

-¿Te gusta el sentido de pertenencia que tienen contigo?- preguntó de manera sarcástica.

-Son lo suficientemente inocentes con eso que hasta me causa ternura- respondí sonriendo mientras peinaba mi cabello hacia atrás.

-Algún día vas a romper el corazón equivocado...

-¿Crees que acabaré muerto o algo así?- respondí con tono burlón.

-Hay gente muy loca por ahí.

Regresé a ver a Marcus con una sonrisa de "¿hablas en serio?" pero su rostro estaba totalmente neutral, tanto, que hizo que mi sonrisa se desvaneciera, estaba notando que Marc cada vez era más hostil con mi situación íntima.

-Marc, cada vez eres más odioso con ese tema- le dije ya con seriedad.

-¿Preocuparme por ti es ser odioso? Vaya, no lo sabía...- respondió con cierta agresividad.

-Qué te hace pensar que debes preocuparte por mí- le dije frunciendo el ceño.

-¿Quizá el hecho de que soy tu mejor amigo?- recibí como respuesta en un tono más fuerte y agresivo.

-No soy un bebé, Marcus, no tienes que vigilar todos mis pasos.

-¡Dominick, lo hago porque me importas!- me gritó, tomo abruptamente mi brazo izquierdo y me acercó con algo de violencia hacia sí mismos sacudiéndome, -¡no quiero que te pase algo malo, con tu estilo de vida puedes adquirir una enfermedad que puede acabar matándote! ¡Puedes meterte con la novia de algún desquiciado que pueda lastimarte! ¡¡No quiero perderte!!

Marcus me agitó más al decir lo último dejándome algo aturdido y sorprendido, el azabache se relajó de a poco soltándome y alejándose un ligeramente, suspiró y solo volteó con lentitud caminando de nuevo.

- Marc, entiendo que te preocupe- le dije provocando que se detuviera sin voltear, -pero debes dejar de pensar que soy un niño descuidado, somos adultos y sabemos lo que hacemos así que...relájate.

Me acerqué a él tocando su hombro, me coloqué a su lado dedicándole una suave sonrisa la cual él correspondió con sutileza, eran pocas las veces que lo veía sonreír, asintió con la cabeza y volvimos a caminar, tomamos el autobús hasta llegar a la universidad y luego a nuestra aula, platicamos hasta empezar clases y pasar la mañana bastante tranquilos, tras eso y aprovechando el cambio de hora fuimos a la cafetería a comer algo sentándonos en nuestros clásicos lugares.

-Muchachos- dijo alguien a nuestro lado, era Rob, el listillo de clases, a veces algo molesto, un chico flaco y desgarbado que parecía estar algo loco, -dijo la maestra que no puede llegar a la hora así que su clase pasa a ser después de la última.

-Uuugh...tiene que ser una broma- dije molesto, -¿en serio saldremos tan tarde?

-Si no te gusta puedes dejar la carrera- respondió con toda frialdad y se largó como si nada.

¡Switch Bish!||YaoiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora