34.- La despedida

495 39 3
                                    

POV Bora:

— Terminaré con Ada — interrumpí nuevamente a Ali, sin mirarlo a los ojos

Ali se quedó callado. Mis ojos se llenaron de lágrimas y mi garganta comenzó a secarse por completo cuando miré a Ada salir del edificio junto a Selin y Zeynep.

Se miraba tan hermosa con sus leggings azules, su blusa con cuello largo y su chaqueta beige. Su sonrisa reflejaba emoción y tranquilidad, no quería hacerla desaparecer.

— Debe haber otra opción...— dijo Ali de la nada, lo volteé a ver confundido.

—¿Cuál?— pregunté

— Pídele a Ada que regrese contigo a Estambul, explícale los motivos, ella entenderá. No cometas los mismos errores de hace tres años — dijo Ali

Suspiré y volteé a ver a Ada, ella volteé a verme y sonrió. Nos señaló con una sonrisa y saludó.

—¿Tu crees que yo quiero dejarla? Ada es la mujer de mi vida, pero dudo mucho que quiera regresar a Estambul. Su pasado, todo lo que la destruyó está ahí — respondí

— Entonces, múdate a Bursa definitivo. Elif estará encantada de estar cerca de Ada, y sobre Bizdeboyle, creo que puedes seguir como hasta ahora — dijo Ali

Pensé en sus propuestas y por primera vez, me agradaban. Ada caminó hasta mi coche y tocó la ventana. Salí del coche al igual que Ali, abracé a Ada y le di un corto beso.

—¿No pensabas bajar? — preguntó Ada con una sonrisa, sin dejar de abrazar mi cuello

Yo abracé su cintura y la acerqué a mí, la besé de nuevo mientras sonreíamos.

— Sí, solo tenía unos asuntos que arreglar con Ali antes de que se fueran — dije sonriendo

Ali miró a Ada y asintió. Nos acercamos a Ali, mientras Zeynep y Selin se despedían.

— Gracias por venir chicos, no saben lo que me divertí con ustedes. Fue un gusto conocerlos — dijo Zeynep con una sonrisa

Ada se despidió de Selin y yo de Ali.
— Los voy a extrañar demasiado — dijo Ada con una sonrisa

— Y yo a ti amiga, pero nos veremos pronto, muy pronto — Selin le guiñó el ojo a Ada y ella la miró mal.

Espera, algo traen entre manos.
—¿Cómo que muy pronto? No entendí— dije

Ada me miró de inmediato con nervios y Selin sonrió inocentemente. Zeynep se puso en medio de nosotros y abrazó a Selin.

— No es nada, Selin solo está bromeando. Es una forma de ocultar nuestro dolor, siendo positivas ante las tragedias — dijo Zeynep

Las miré con incredulidad y las tres sonrieron con complicidad. Can llegó en su auto y se estacionó enfrente de nosotros.

—¿Acaso pensaban irse sin despedirse de mi?

Selin y Ali abrazaron a Can con una sonrisa. Él se acercó a nosotros, dándole un beso en la mejilla a Zeynep.

Sonreí de lado — Chicos, no es una despedida. Nos veremos pronto, cuidan mucho de Elif por favor — dije, abrazando a Selin y Ali por última vez

Se subieron a su camioneta, despidiéndose de cada uno de nosotros y arrancaron. Nos quedamos viendo como nuestros amigos se iban de nuevo.

Ada recargó su cabeza en mi hombro y yo la abracé.
Suspiró — Los voy a extrañar...

Bajé la mirada y la miré — Puedes cambiar eso...— respondí

Ada me miró confundida y antes de que preguntara algo más, Can nos interrumpió.

— Vamos a desayunar, antes de que Zeynep se ponga de mal humor — dijo Can riendo

—¡No me pongo de mal humor! — se defendió Zeynep

— Oh, claro que si lo haces. Una noche me dejó fuera del departamento solo porque no ceno a tiempo por mi culpa — dijo Ada

Comenzamos a reír mientras Zeynep nos miraba mal. Can abrazó a Zeynep y le dió un beso en la mejilla para contentarla. Caminamos al coche de Can y nos montamos en el.

— Digan lo que quieran, mis aura de paz no se verá afectada por sus malos comentarios y mala vibra — dijo Zeynep

Miré a Ada y ella rodó los ojos divertida. Can arrancó el coche y condujo hasta un centro comercial.

Me confundí por completo —¿Qué hacemos en un centro comercial? — pregunté

Can se estacionó y miró a Zeynep con una sonrisa. Bajamos del coche y caminamos hasta las escaleras eléctricas.

—¿Enserio? ¿Nadie me va a decir que hacemos en un centro comercial?— pregunté de nuevo

— Aquí está el restaurante favorito de Zeynep. Desayunaremos y después, seremos los cargadores de las chicas — dijo Can con una sonrisa fingida

Negué con la cabeza —¿Cargadores?

— Si, cada fin de semana, Ada y yo venimos de compras. Antes nosotras cargábamos todo, pero ahora, Dios nos ha dado novios para que lo hagan por nosotras — dijo Zeynep con una sonrisa inocente

Volteé a ver a Ada confundido y ella sonrió con inocencia. Zeynep tomó de la mano a Ada y ambas corrieron a una tienda de ropa.

— Lo siento hermano, pero de ahí no saldrán dentro de media hora mínimo. ¿Qué tal si me ayudas con algo? — dijo Can

Lo miré y asentí —¿Qué cosa?

— Le estoy preparando una fiesta sorpresa a Zeynep. Durante estos últimos años se la ha pasado demasiado mal y yo no estuve para ella lo suficiente, así que quiero que la pase bien por lo menos un día — dijo Can

Asentí — ¿En qué quieres que te ayude?

— Solo que no falten tú y Ada. La fiesta será en la finca de mi abuelo, en Estambul. Quiero que Zeynep esté rodeada de sus seres queridos y que se divierta — dijo Can

Ahora todo tenía sentido. Ada sabía sobre la fiesta de Zeyzey y por eso, Selin le insinuó que pronto se verían.

—¿Ada lo sabía? — pregunté solo para confirmar mis sospechas

— Si, ella me ayudó a organizar todo, por eso estamos aquí. Ada me contó sobre sus planes en fines de semana y yo, traje a Zeynep con esa excusa — dijo Can

Sonreí y asentí. Tomé la mano de Can y lo abracé. Esperamos a que las chicas terminaran de comprar su ropa y las ayudamos al salir, con todas las bolsas de lo que habían comprado.

— Ahora si, muero de hambre — dijo Zeynep

Can y yo nos miramos, y comenzamos a reír sin parar. Entramos a un restaurante, ayudé a Ada con la silla y me senté a lado de ella con una sonrisa.

...
Nota: Falsa alarma, hay adbor para rato...o eso creo.

En Otra Vida | Baht OyunuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora