El futuro no planeado

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Resumen

Kisaki quiere culpar a medio mundo, pero sabe que por mucho que se queje, ya no hay vuelta atrás para esta situación extraña, en donde él era la parte responsable y tenía que soportar los dramas de su autonombrada familia

"Quiero el divorcio, eres un mal padre" menciono el dios de la muerte haciendo pucheros

"Quiero plata" se escuchó de un niño con claros problemas de ira

"¡Queremos un hermanito!" y esos eran los insufribles gemelos de la toman

Kisaki se masajeo el puente de la nariz, murmurando maldiciones mientras intentaba buscar una salida

"! Demonios, ya os dije que no soy su madre!" termino gritando el chico inteligente, sintiendo como sus neuronas decidían darse un viaje y no por culpa de los regalos de Hanma, Kazutora o Sanzu



Cuándo Kisaki empezó a planear su futuro como delincuente realmente no esperaba terminar en una situación similar a la que se daba a unos metros suyo

"Quiero un helado, ¿me compran un helado?" molestaba el insufrible número 2

"Ne Ta-ke-mi-chi ¿Quieres golosinas?" Ese era Kazutora ofreciendo una bolsita sospechosa

"¡Kazutora!, No experimentes con él, qué después nos regañaran" ah, y ese era el insufrible número 3, protegiendo al número 2 a pesar de que era el menor (y podía escuchar el grito de "solo son unos meses" del niño cuando lo menciono al expresar sus dudas sobre el tipo de ' relación de familia ')

Kisaki se ajustó las gafas sintiendo el indicio de una migraña, preguntándose de nuevo cómo fue que sus planes perfectamente estructurados terminaron en eso, una aparente familia en donde él era el responsable de un trio de adolescentes que actuaban como niños pequeños y consentidos... Oh, y por ahí asomaba el culpable de que ahora fuese visto como mamá sustituta

"Kisaki-kun, te traje tu bebida favorita <3" una mano revolvió su cabello mientras un vaso de café era ofrecido, la voz del culpable era extrañamente suave aun cuando se sentía un indicio de diversión por toda la situación

"Gracias Hanma, por favor no vayas a fumar frente a esos mocosos" bebió su café relajando sus hombros con el calor de su bebida favorita, acomodándose en el regazo del mayor, sintiendo que la vida le había duplicado los años "y quítale los dulces a Kazutora, algo me dice que se los dio Sanzu y no quiero ver a Hanagaki de viaje cuándo tendremos una reunión pronto"

Se escuchó la risa de Hanma, llamando la atención de los insufribles de inmediato, los cuales dejaron de discutir y se acercaron rápidamente exigiendo sus regalos con la mirada, Kisaki agradeció que se acercaran sin demasiado ruido, parece que amenazarlos con mandarlos a dormir temprano rindió sus frutos (justo como una mamá, se filtró un pensamiento que fue prontamente ignorado, aún estaba en negación)

Pero, la pregunta del millón era ¿Cómo demonios llego a esta situación? Aun puede recordar los días en donde el mocoso 2 le veía con odio...

Quizá debió mandar a la moral de viaje cuando vio que su querido mocoso 1 estaba por matar al agresivo capitán de la primera división de la Toman

Y sin querer, ahora estaba aquí, con tres mocosos, uno de ellos de viaje, otro con dolor de estomago por comer demasiado dulce, y el tercero con un par o dos de moretones pero sosteniendo una sospechosa bolsita (que Sanzu veía con tristeza, haciendo sospechar de su contenido), más un irresponsable acompañante, escuchando como Mitsuya le pedía que por favor controlara a sus hijos o si no les quitaran la tutela y se la darán a Baji

"Pero Baji es el mayor impulsivo que conozco" fue un comentario con lógica

"Es por ello que te pido que controles a esos críos o me veré en la obligación de que los veas en manos del maniaco pirómano" menciono con cierta burla el capitán de la segunda división

"¡Nos haremos cargo de nuestros queridos hijos!" fue la respuesta alegre de Hanma

"Espera, ¡en ningún momento acepte esto, y no son mis hijos!" Se quejó Kisaki, siendo ignorado por todos mientras Draken daba a conocer la nueva posición de Hanma y Kisaki dentro de la pandilla

De alguna manera, Tetta sintió como su cordura estaba próxima a darse un largo viaje

No era el planDonde viven las historias. Descúbrelo ahora