Se supone que este corto estaría hace unas semanas atrás... lo olvide, mea culpa, ¿perdón?
Al entrar a la casa se podía escuchar una banda sonora tocando música triste, las voces desesperadas de los actores indicaban que la película que Takemichi veía era dramática y triste, los pequeños sollozos que resonaban en la habitación solo acentuaba el deprimente ambiente.
Chifuyu entro a la habitación con dulces en los brazos mientras guardaba silencio, la experiencia le había enseñado que acercarse a un lloroso Takemichi equivalía a ser usado como paño de lágrimas, un trabajo lindo pero que hoy prefería que cualquier otra persona tomara su lugar, intentando no hacer ruido paso a la cocina, escuchando otro par de sollozos que no conocía, logrando sorprenderlo.
Con mucho cuidado vio a quien estaba sollozando llevándose una sorpresa, ya que tanto Inui como Kisaki tenían lágrimas corriendo por sus mejillas
— ¿Qué demon — empezó a cuestionar, siendo detenido por un golpe suave en la cabeza proveniente de un Koko bastante burlón
— No preguntes y mejor ve con Takemichi— Menciono el pelinegro, divertido por las expresiones de Chifuyu
— Pero, yo — Chifuyu no tenía palabras para expresar su conmoción— No sabía que esos dos tenían sentimientos
— Y no los tienen — susurro Haruchillo, quien entraba con un par de vegetales en las manos
— entonces ¿Por qué lloran? — cuestiono un confundido rubio
— Están cortando cebollas ¿No lo ves? — mascullo Haruchillo con fastidio
—oh, eso tiene sentido— murmuro Chifuyu tras una mejor observación
— Y dicen que el ciego soy yo— murmuro Koko mientras arrastraba a Chifuyu hacia Takemichi —Mejor consuela a tu tonto amigo y deja la cocina en manos de otros
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No era el plan
RandomKisaki quiere culpar a medio mundo, pero sabe que por mucho que se queje, ya no hay vuelta atrás para esta situación extraña, en donde él era la parte responsable y tenía que soportar los dramas de su autonombrada familia "Quiero el divorcio, eres u...