9: volviendo a casa

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[Pov.Einar]

Ya hace mucho que nos refugiamos en el templo, no se si han pasado dos o cinco horas, después de todo aquí no hay relojes pero se que todavía es de noche por el simple echo de que el cuerpo me pesa mucho y me cuesta respirar aun mas que los primeros momentos en los que entre aquí abajo.

Einar: “*inhalar*…*exhalar*” respiraba con pesadez.

Esclava 1: “¿se encuentra bien joven amo?” me pregunto preocupada.

Einar: “no te preocupes, estoy bien, solo que me cuesta respirar un poco” la tranquilice.

Esclava 2: “aguante joven amo, es la maldición de la luna de sangre, en cuanto la noche termine la maldición también lo hará” me conforto.

Einar: “lo se, gracias” le agradecí por sus palabras.

Estas esclava estaban cuidándome por orden de la abuela Ingrid, pero eran muy tiernas conmigo además de estar sorprendentemente calmadas en esta situación.

Al mirar los alrededores del área donde estábamos, podíamos ver a muchas personas angustiadas, preocupadas, otras rezando o al menos eso parecía.

De vez en cuando se filtraba el sonido de la batalla que se libraba en la superficie, se podían escuchar explosiones, gritos y algunos rugidos, en algún punto se escucho un rugido muy fuerte que asusto a mucha gente aquí, incluso yo me sorprendí por lo fuerte y claro que sonó estando bajo tierra aunque después de un tiempo no se volvió a escuchar, aun así empezaba a preocuparme mas por mi abuelo.

Einar: “¿Cuánto creen que falte para que termine la noche?” les pregunte a las esclavas para tener una idea del tiempo.

Esclava 3: “mmm, talvez un par de horas” me respondió la que estaba cuidando las pertenencias de mi abuelo y mías.

Einar: “¿en serio?, entonces no tardaremos en salir de aquí” dije un poco mas contento.

La cosa no podría estar tan mal afuera, después de todo la lucha no llego a las puertas del templo.

Esclava 1: ¿por ahora porque no duerme joven amo hasta que vengan las soldados?, a estado despierto toda la noche” me recomendó

Era cierto que estuve despierto toda la noche estando atento a cualquier cosa que pudiera pasar, y ahora que se mas o  menos que no hay problema afuera y que pronto terminaría la noche, el sueño me invadía asique haciendo caso a la esclava me recosté contra la pared para dormir un poco hasta que nos dijeran que podíamos salir.

Pero cuando estaba por dormirme golpearon la gran puerta, la gente comenzó a levantarse rápidamente y a hacer bullicio, un grupo de guardias que estaban aquí comenzaron a tranquilizar a la gente mientras que otras se dirigieron a la gran puerta.

Al cabo de unos segundos las guardias comenzaron a abrir la puerta y anunciar que sus fuerzas lograron repeler la invasión de monstruos y que ya era seguro salir a la superficie.

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