NOUS DANSONS?

Capítulo 10

Mensajes:

-¡¿Ey amigo... Dónde estás?! - No lo voy a negar, quería dejar el mensaje de Dylan en visto, pero se que seguirá molestando hasta que le conteste.

-En el trabajo, ¡¿donde más imbécil?! -.

-Uff, ¡ESTÁ BIEN!!, ¿Me gastas una malteada? -.

-¿Por quién me tomas...?, ¿acaso soy tu hada madrina? -.

-¡¿Lo harás o no?! -Y... En visto.

Fin de los mensajes:

-¿Y...? - dijo Héctor cuando se me acercó.

-¿Qué? -.

-Vamos... ¿Qué a pasado con aquella chica? -¡¿por qué todos me preguntan por Cassie?! -Viene casi que todos los días y solo para verte, claro que le gustas-.

-Tal vez... Pero yo no siento lo mismo-.

-¿Estás cien por ciento seguro? - entonces la campana me salvó, aunque ni tanto la verdad, porque cuando voltee a ver quien era pues... Hablando del Rey de roma-Vaya... Pero que coincidencia- dijo Héctor con una sonrisa pícara y luego se fue.

-¿Tienes planes...? - traía su uniforme, así que lo más seguro era que no había ido a casa en toda la tarde y ya era un poco más tarde, casí las siete de la noche y mi hora de salida.

-Si... Trabajar-.

-Depués del trabajo pues- ¿Cómo es que tiene tantas energías para venir acá casi que todos los días?.

-Sí- en realidad no, pero quería que se fuera.

-Mientes... Lo veo en tus ojos-No es que vea eso en mis ojos, soy demasiado obvio a veces-Esperaré a que termines entonces- dijo con una sonrisa y después se fue a sentar a una de las mesas libres.

Me quedé observando un par de segundos a Cassie, me preguntaba el por qué estaba interesada tanto en mí, ¿acaso no se aburría de esperar algo que claramente no pasaría entre los dos?, mi vida es aburrida y no creo que le interese en lo absoluto, sin embargo sigue ahí, está ahí, sentada en aquella silla viendo su teléfono mientras espera a que termine el trabajo, estaba tan perdido observando a Cassie y pensando que me olvidé por completo de mis tareas en el lugar, por lo que Héctor tuvo que acercarseme para sacarme de mis pensamientos y regresarme a la realidad.

-Joe... -.

-ammm ¡¿Si?! -.

-¿En que piensas...? O mejor dicho, ¿en quién piensas? - nuevamente esa expresión, ¡DIOS NO ME LO HAGAS TAN DIFÍCIL!.

(...)

Mi turno se había acabado, pero Héctor me había pedido el favor de ayudarlo a limpiar un poco el lugar mientras el se encargaba de algunas cosas, intenté convencer a Cassie de que se fuera a casa ya que tendría que quedarme un poco más a limpiar, pero se negó y en su lugar tomó un trapo y me ayudó a limpiar algunas de las mesas, con su ayuda todo fue más rápido, ya por último me encontraba limpiando la encimera, Cassie al parecer también había terminado con las mesas, pues rato después se acercó y dejó el trapo a un lado en la encimera, ella se encontraba del lado en el que normalmente están los clientes cuando van a ordenar y yo me econtraba del otro lado, en la parte de donde se encuentra la Caja registradora, pero estamos frente a frente.

-¡Terminé! -dijo felíz.

-Gracias... Por la ayuda- vaya... Eso si que no me lo esperaba, ¿Enserio acabo de agradecerle?.

-No hay problema- ¡ahí está!, esa sonrisa una vez más, AHHH-Así fue más rápido, ¿ves? - dijo está vez mientras apoyaba sus brazos sobre la encimera que nos dividía-¿Cómo estás? -.