Capítulo 27.

1.1K 75 0
                                    

-¿Todo está resuelto?.-Preguntó, mi cabeza parecía que iba a explotar con tantas dudas que tenía.

-No lo sé, te amo, pero me mentiste.-Le dije, él se acercó y se arrodilló frente a mi quedando a mi altura sobre el sillón.

-Olvida tu orgullo, dejame remediar todo, no te mentiré de nuevo.-Sus ojos transmitían perdón y esperanza.

-Por algo te amo.-Le dije, besé sus labios y él comenzó a hacerme para atrás lentamente. Sus labios pasaron a mi cuello y me sentía algo nerviosa, jamasw lo había hecho con alguien.

-Te amo más que a nada.-Dejó de besarme para mirarme bajo de él.-Quiero que estés segura, no hay presión.-Dijo, y por aquellas palabras me sentí de verdad muy agradecida.

-Creo que aún no estoy lista.-Le dije, él se levantó y me ayudó a levantarme junto a él.-Quiero que me entiendas.-Le dije, pues me daba miedo que se enojara.

-Ya te dije que no hay presión, te amo y esperaré todo lo que sea necesario.-Besó de nuevo mis labios y pasé mis manos lo su cabello.

-Quisiera que me explicaras algunas cosas.-Él bufo, sabía de lo que yo estaba hablando.

-Fue una campaña para publicidad, ella es modelo y actriz.-Comenzó.-Yo sabía que vendrías ese día y por eso la llamé, pero las cosas no resultaron como pensé.-Reí un poco.

-¿Tu lo planeaste?.-Le pregunté alegando mi rostro un poco.

-Si, pensé que al vernos ahí mismo me dirías que me amabas y yo, obviamente, volvería a tus brazos, pero en lugar de eso me mandaste a la mierda.-Ambos reímos.

-Eres un gran tonto.-Le dije riendo y pegando nuestras narices.

-Pero soy tu gran tonto.-Dijo dando pequeños besos en mi boca.

-También me debes una explicación por no decieme nada desde un principio.-Le dije, él dejó de besarme y me miró neutro.

-No te quería decir nada por esto mismo, por todo lo que iba a suceder.-Se encogió de hombros.-Por que estoy totalmente enamorado de la chica que trajo las malteadas.-Sonreí y en eso recordé a mi prima y a Taylor, necesito hablarle a Vale.

-Lo sé, soy difícil de superar.-Moví mi cabello hacía atrás con mi mano y él río.

-Lo sé, lo tengo muy claro.-Su sonrisa volvió a aparecer lo que me hizo sonreír.

Estaba tan cómoda acostada sobre el pecho de Nash, que no me había dado cuenta de que él se había quedado dormido. Me levanté del sillón y enserio que me dolía el trasero. Nash tomó uno de los cojines y lo abrazó, me reí por su acto y le tomé una foto. Tierno.

Gloria aún no daba señales de vida, entré a mi habitación y cheque mi teléfono.

"Gloria: ¿Te gusto mi sorpresa? Se que si, de nada" Tonta, aún que su sorpresa me había encantado.

"¿Qué sorpresa? ¿Qué no me dejaste dinero? Claro que no me gusto" Le envié, el mensaje era de ayer y probablemente aún esté dormida.

"¿¡Qué!? ¿No me digas que el stripper que te mande no llegó?" Solté una carcajada.

-¿De que te ríes?.-No había sentido que Nash ya había despertado y me asuste un poco.

-Mira esto.-Él me abrazó por la espalda sosteniendo su cabeza con mi hombro y comenzó a leer.

"Si llegó, pero está muy gordo, manda otro más bueno" Le respondí.

-¡Oye!.-Mi, ahora, novio se quejó y yo reí.-No estoy gordo.-Dijo, me giré para verlo.

-Claro que no.-Le dije subiendo un poco su camiseta, y pues; no estaba gordo.

-Todo ésto es tuyo.-Señaló su abdomen y reí.

-Eso me gusta, que sea mío.-Tiré mi teléfono a la cama y lo abracé por el cuello.

-¿Eres mía?.-Preguntó con sus labios a centímetros de los míos, asentí.-Y de nadie más.-Confirmó él.

-Sólo besame.-Le dije pegándolo a mi y dándole un beso fuerte y salvaje.

El Restaurante | Nash GrierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora