Capítulo 25.

1.4K 77 9
                                    

-Me duele la cabeza.-Le dije a mi hermana entrando a la cocina.

-¿Quién te manda tomar tanto?.-Preguntó sarcástica.

-Jamás había tomado así, y jamás lo haré, nunca.-Prometí y busqué alguna pastilla para el dolor de cabeza.

-¿Arreglaste las cosas con Nash?.-Preguntó de la nada, me giré a verla.

-No, ¿por qué la pregunta?.-Le dije y caminé hasta el garrafón con agua para servirme en un vaso.

-Porque ayer los vi subir a las habitaciones.-Me guiñó un ojo pícara.

-En cuanto subimos me quedé dormida, no hablamos nada.-Le dije, en parte era cierto.

-Cass, me he dado cuenta de que aún eres la Cass ingenua.-Negó repetidas veces, ¿quién se cree?.

-¿Disculpa? ¿Por qué dices eso? ¿Por dejar al tonto de Nash? ¿Sabes? Es mi vida, no la tuya, no te metas.-Dejé a Gloria con las palabras en la boca y fui a lo que era mi habitación.

Estaba enojada, realmente muy enojada. Quería llorar y sacar todo, estaba triste, enojada, débil; desbastada. Me tiré en la cama, no había notado que tenía una foto mía y de Nash en el escritorio y las lágrimas comenzaron a llegar.

-Cass.-Una hora después mi hermana llamó a mi puerta.-¿Por qué lloras?.-Preguntó acercándose hasta mi.

-Me acabo de enterar de que Zayn Malik a dejado One Direction.-Le dije, me sentía mal por ello, pero eso no era lo que verdaderamente me dolía.

-No seas ridícula.-Su voz sonó algo rara lo que me hizo reír.

-Necesito a Nash.-No pensaba decir aquello, pero tenía que decirlo. No podía mentir más.

-Habla con él, tiene sus razones.-Me dijo seria.-Mañana será la premiere de la película de Cameron, estás invitada.

-Claro, gracias, trataré de hablar mañana con Nash.-Le dije, y en verdad lo haría.

-¿Me acompañarias?.-Preguntó de la nada.

-¿A dónde?.-Pregunté inocente.

-Mañana es la premiere de Cam, tenemos que ir formales.-Repitió y le sonreí.

Salimos del departamento de mi hermana, subimos a su coche; íbamos platicando cosas sin sentido. Extrañaba hablar así con mi hermana, nos llevábamos mejor que antes desde luego. Los grandes pasillos del Mall de Los Angeles hacían que me arrepintiera de acompañar a Gloria; eran demasiado largos. Mi hermana se media cada cosa que le gustaba o que le llamaba la atención, mientras que yo sólo veía de un lado a otro buscando algo lindo para mañana. Soy difícil en éstas cosas.

-¿Qué te parece?.-Me preguntó mostrando un lindo vestido color salmón o rosa pastel.

-Es lindo.-Dije ya enfadada de estar aquí.

-Pruebatelo.-Me lo extendió, negué.-Anda, es de tu estilo y gusto.

-Es muy corto.-Me excuse.

-Es del mismo largo que el vestido que te preste.-Su mirada de enfado me decía que me tenía que medir el vestido.

Se veía lindo, Gloria me entregó una zapatillas color blancas a juego y no me veía nada mal. Mi miré de todos ángulos posibles, me gustaba como lucía, sin embargo no me sentía yo. Volví a mirarme al espejo; bien, éste será.

La noche había caído, Gloria pidió pizza y después me dijo que saldría con Cameron terminando de cenar. De nuevo; sola. Sola con mi sufrimiento viendo Hora de Aventura, odiaba esa caricatura.

El timbre hizo que me sobre saltara un poco, me levanté del sillón a paso lento y abrí sin preguntar quien era.

-¿Qué haces aquí?.-Le pregunté a Jack, Jack Matthews.

-Quería verte, perdón por no avisar.-Se disculpó y me sonroje levemente.

-No te preocupes, ¿cómo estás?.-Preguntó, raro.

-Bien, supongo, toma asiento.-Le indiqué, él tomó asiento en el sillón mediano justo frente a mi.

-Cass yo...-El timbre impidió que Jack siguiera hablando y de nuevo me levanté del sillón.

-Nash.-Eso sonó como un suspiro más que un tono de desagrado.

-¿Qué hace él aquí?.-Preguntó señalando a Jack.

-No te interesa.-Le dije seria, él entró al departamento sin nada que decir.

-Tu me importas, todo lo que tenga que ver contigo me importa.-Me miró molesto y hasta me asusto un poco.

-Veté por favor.-Le pedí con un suspiro al final.

-Cass y yo estamos saliendo.-Jack hizo que los dos voltearamos a verlo con los ojos muy abiertos y sorprendidos.

-¿Qué?.-La voz de Nash sonaba mucho más furiosa.

-No, no es verdad.-Dije teanquilizandolo.

-¿Qué?.-Ahora el ofendido era Jack.

-Por favor, Jack, lo siento si pensaste otra cosa.-Le dije, él me miró serio.

-Entonces..

-Nada,-Interrumpi a Nash.-no quiero un novio por ahora, ambos son mis amigos, hasta ahí.-Nash bufo y salió molesto del departamento. Jack me miró, sonryió y también se fue. Raros, hombres raros.

••••
»Nota«
Chicas, perdón por la tardanza, pero estuve muy ocupada con tareas y eso..
Gracias por la espera, los votos y las leídas, me encantaría ver más comentarios, respondo a todo...
Gracias mis babys, las amo..
Lindas vacaciones de Semana Santa

El Restaurante | Nash GrierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora