Tan cerca y tan lejos

Capítulo 3

Mierda, mierda y mierda.

Oh no, oh no no no. Les cuento, la que acaba de entrar es mi amiga Alisson, ya que no se las describí al principio pero se los diré ahora. Alisson es alta, blanca de 1.69, pelirroja, tiene unos lindos ojos azul cielo, nariz perfilada y con un cuerpo voluptuoso, ¿Ven por qué el arrogante de Ethan quiere salir con ella? Es demasiado perfecta diría.

Algo que tampoco les conté ¿No lo hice verdad? Cierto que no, jeje, un pequeñito detalle. Alisson tiene un Crush con el insoportable de Ethan (Si, y nos acaba de ver tan cerca que cualquiera malinterpreta el momento, de cierto modo yo lo haría). Yo nunca estuve de acuerdo que ella se fijará en el, pues Ethan todo lo que ve a su paso lo destruye (no literalmente) pero hablo de sentimientos, me importa muchísimo Alisson, no quisiera que dejara a mi mejor amiga con el corazón roto, pero ahora me acabo de dar cuenta que los dos tortolitos se atraen.

—Ali... No es lo que parece –digo rápidamente y me suelto bruscamente de Ethan.

—Ah ¿no? –se cruza de brazos– entonces explica antes de que me vaya.

—H-hola Alis –saluda Ethan y le sonríe, pero ella lo ignora.

—Habla pues Brigitte –dice de brazos cruzados y levantando una ceja.

—Solo estábamos hablando –dice Ethan con indiferencia y se enconge de hombros.

—No te preguntaba a tí Ethan –le dice ella con tanta dureza que el retrocede– habla, ¿O te quedaste muda? –me mira.

—No, solo que no... Se que decir y... –ella me corta.

—¿Ah no? Entonces me voy –dice mientras gira sobre sus pies hacia la salida y yo le hablo.

—¡Ali espera! Te lo explicaré lo prometo, solo espera –le digo mientras voy detrás de ella y le susurró cuando estoy cerca– no actúes así porque Ethan se dará cuenta.

Ella reaccionó, noto que tenía razón, lo pensó mucho, me miró tanto que trague grueso y luego regresamos. Ethan estaba sentado en el sofá de la sala de estar, revisando su celular, estaba tan tranquilo como si no me hubiese puesto de espaldas y mordido el lóbulo de mi oreja hace unos momentos, si que tiene pelotas.

De pronto Ethan nos ve, se levanta y mira en dirección a Alisson, le sonríe y note que se estaba ruborizando ella no le sostiene la mirada y comienza jugar con sus dedos, note el nerviosismo y le hablé.

—Bien Ethan, yo le digo a mi mamá, puedes irte –le digo con los ojos bien abiertos y le señalo la puerta con ellos.

—Esta bien –dice mientras se acerca–  oye Alis  –ella lo mira–  hoy estás hermosa  –le sonríe y Ali lo mira con los ojos bien abiertos mientras sus cachetes toman un  leve color rosa y con eso se va.

—Oh-por-Dios, ¿Acabas de escuchar lo que me dijo? –me comenta Alisson ruborizada.

Pongo los ojos en blanco —Si, pero se lo dice a todas –de pronto veo una reacción de decepción en su rostro y recuerdo que tengo un acuerdo con el idiota de Ethan– pero quizás contigo en esta ocasión es diferente –le sonrió forzosamente.

—¿Tu crees? –me mira Alis con expresión de preocupación en su rostro.

—Claro que si muñeca ¿Acaso no te haz visto en un espejo? Eres un mujerón –le guiño y ella sonríe.

—No es para tanto –dice mientras pone un mechón de su cabello detrás de su oreja.

—Claro que es para tanto chica. Si yo fuera hombre... –le digo y ella empieza a reír.