Capítulo 4

8.3K 462 122
                                    

Marthina:

El día de hoy fue algo...aprovechado.

Asalte la nevera, comi muy bien y estoy bien. ¿Qué más se puede pedir en la vida?

Veo como Nicolas empieza a caminar hacia mi y me sonríe.

—Tenías mucha hambre ¿No, Kathy?— dice divertido.

Le sonrió, —Si, ayer no comí del todo bien.

—Pasaré por ti en unas dos horas, y también vendrán los chicos. Alistate para cazar.

Asiento con la cabeza y luego veo como Nicolas se empieza a encaminar hacia la puerta.

—Adiós, Kathy. Nos vemos luego.

—Adiós, Nicolas— le sonrió.

Y con eso, el sale de la habitación y yo borro instantáneamente mi sonrisa.

Que detestable es finjir una sonrisa todo el tiempo.

Y que detestable eres tú cuando te apoderas de mi cuerpo sin pre-aviso.

Ay, ya deja el drama.

Déjame. No supone que tienes que salir sin que te lo permita.

Pues déjame decirte que no sabes como controlarme del todo bien.

Eres una...

Soy la persona que ahora esta al control de tu cuerpo, ten cuidado con lo que digas.

Si, eso pensé.

Dejando de lado a la odiosa de Kathy, sigo con lo que tengo planeado.

Tomo mi teléfono, y hago una llamada.

Ay no...por favor el no de nuevo.

—Necesito que nos volvamos a ver— digo en cuanto contesta la llamada.

—¿Ah, sí? ¿Qué quieres ahora Marthina?

—¿Cómo sabes que soy Marthina? Podría ser Kathy y estar engañandote.

—Mmmm...Kathy no se sabe mi número de teléfono de memoria como tú.

—Mmm, si, me conoces bien.

—Entonces ¿que quieres?

—¿Quieres asesinar a alguien?

No, no asesinaremos a nadie.

—¿A quien en específico?— dice dudativo.

—A un chico rubio— digo simple.

Alto, alto, alto, no dejaré que mates a mi protagonista.

No me importa lo que quieras vocecilla horrible.

—Si eso me consigue volver a repetir lo de antes, acepto.

Sonrió para mi misma y luego cuelgo la llamada.

Martina, se que puede que te enojaras por lo que sucedió la vez anterior, pero...

¿Lo que sucedió la vez anterior? Casi me matas.

Y lo hubiera echo si mi madre no me hubiera interrumpido en el proceso del rito.

Lo lamento Kathy, tu cuerpo es mío ahora.

¿Por qué no mejor te...duermes, durante un largo tiempo?

[...]

Sigo caminando hasta que siento algo duro contra mi estómago.

Respiro agitadamente y sudor frío empieza a bajar por mi frente. Si, esto es malo.

¿Mi cazador? [Poe Verne y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora