¿Mi cazador? [Poe Verne y Tú]

Capítulo 7

Kathy:

—¡Agh! ¡Duele mucho!— digo cerrando los ojos, sintiendo las fuertes punzadas.

—Más— dice el señor Rogers, haciendo que los científicos suban la intensidad.

Si, bueno, depsues de la primera ocasión en que pasó esto. El señor Rogers decidió que sería mejor ir a un lugar menos...audible, así que me separo y cuando desperté, estaba en un bunker, unos...diez metros bajo tierra.

Según el señor Rogers, esto era para bien, según el, podría ayudar a todo aquel que sufriera algo incurable. Así que trajo a médicos y científicos expertos en anomalías.

Los científicos, pusieron unas cosas en mi cabeza conectada a cables que hacían que en sus pantallas se vieran mis "frecuencias raras".

No se cuanto tiempo eh estado bajo tierra, sin alimentación correcta, sin hábitos adecuados y sin cuidados corporales. Pero lo que sí se, es que al menos, llevo dos semanas aquí abajo.

—Señor Rogers, si sigue así puede afectar al sujeto— dice un científico mediano, con una tableta y algo nervioso.

Ja...ahora resulta que soy un sujeto, si, que lindo. ¿Quien no quiere algo así?

El señor Rogers me ve con algo de...¿enojo? —. Alto, paren— da la orden y se acerca a mi.

—Niña mocosa, lo que sea que estés haciendo para evitar que tu poder se manifieste...¡déjalo!

El grito repentino que dio, sin dudas no sólo me asusto a mí. Logré visualizar a muchos científicos y doctores dando un salto por la sorpresa.

—¡No estoy haciendo nada!— digo en mi defensa —. No es mi culpa que su estúpido experimento no funcione, ni siquiera se que es lo que quiere de mi. ¡Ni siquiera se lo que según usted puedo lograr!

El señor Rogers me da una mala mirada, se empieza a acercar más a mi, hasta que queda a algunos pasos de la camilla en la que me tienen retenida.

Si, esto ya había pasado muchas veces antes, el grita, yo grito, se enoja y me golpea la cara haciendo que de mi nariz salga un hilo fino de sangre.

Algo inesperado, es que antes de que eso suceda, un científico joven se interpone.

—Señor Rogers, necesito hablar con usted en privado, creo que descubrí algo importante sobre el sujeto.

El se calma, asiente con la cabeza y luego se aleja hacia la puerta con el chico de aproximadamente diecinueve años siguiéndolo.

Pero, antes de que el chico saliera por completo de la habitación, se voltea a mi y me guiña un ojo, luego cierra la puerta y todos vuelven a su trabajo normal.

Alto, ¿lo hizo por mi?

Por ti, hasta yo lo haría, querida.

Poe:

—¿Qué recuerdas?

—Ya telo dije Padme— digo rodando los ojos —. Sentí a alguien detrás de mi y volteé, la vi y empeze a pelear con esa persona, pero alguien me inyecto algo por detrás y no pude ver nada, solo como se llevaban a Kathy.

Paso mis manos por mi cara, frustrado.

—¡Debemos hacer algo!— dice entrando en crisis —. ¡Buscarla, intentar!

—¿No que no la querías?— dice Tatiana, algo confundida.

—¡No la quería, pero no como para que la secuestraron y estén haciendo saber que con ella!— dice alterada.