No me dejes sola - Bakugo x OC

Lluvia

Zula estaba acostada en su cama mientras escuchaba música, estaba a punto de dormirse pero, de la nada, su teléfono se apagó (se había quedado sin batería).

"Rayos" pensó, todavía le resultaba muy difícil dormir sin música.

Se levanto de su cama y fue por el cargador, y cuando lo estaba conectando; pudo escuchar un sonido familiar que provenía de afuera. Era el sonido de gotas cayendo, de un momento a otro, comenzó a llover muy fuerte.

Ella corrió al balcón para verificar sí de verdad estaba lloviendo, se dio cuenta de que era cierto y con una gran sonrisa, bajó corriendo a la sala común para poder salir.

Ni siquiera se cambió de ropa o se puso un abrigo, salió con pijamas y se mojó completamente. La lluvia siempre le ha encantado, la hacía sentir muy feliz y llena de emoción.

Mientras Zula jugaba afuera. Bakugo se encontraba en su cuarto durmiendo, hasta que unas gotas alcanzaron a tocar su rostro y lo despertaron, pues el no había cerrado la puerta por completo anteriormente.

Se levantó de muy mal humor, y cuando agarró la puerta para cerrarla escuchó una risa a lo lejos, asomó la cabeza por el balcón para ver de donde provenía esa risa, fue cuando vio a Zula saltando en los charcos y corriendo por todas partes.

"Esa idiota..." pensó. Intento gritarle desde su habitación pero parecía que ella no lo escuchaba o simplemente lo estaba ignorando, así que después de enojarse más de lo que ya estaba, decidió bajar para decirle que se metiera de una vez a la residencia.

Una vez ahí:

Bakugo: OYE, QUÉ DIABLOS CREES QUE HACES??

Zula: Qué dices??? No te escuchooo

Bakugo: SI CREES QUE IRÉ HASTA AHÍ, ESTAS LOCA

Ella lo ignoró y siguió jugando bajo la lluvia.

Bakugo: Yo me largo de aquí

Zula: Oye, esperaa!! (Fue corriendo hasta donde estaba el) Te propongo algo

Bakugo: Qué? Solo métete, maldita loca

Zula: Sí me atrapas, lo haré. Pero sí no, te quedarás a jugar conmigo

Bakugo: No quiero

Zula: Ahh sabía que ibas a decir eso. Lo entiendo, de cualquier forma no podrías atraparme... eres demasiado... len-to

Bakugo: .... Es mejor que empieces a correr, ninja de cuarta

Zula salió corriendo de ahí y Bakugo fue detrás de ella. Mientras lo hacían, ella se moría de la risa, se notaba que se estaba divirtiendo mucho. Bakugo pudo notarlo y dejó escapar una pequeña sonrisa.

Los dos estaban empapados corriendo bajo la lluvia y se resbalaron un par de veces. Después de unos minutos de correr tras ella, pudo alcanzarla y tomarla del brazo.

Bakugo: Ya está. Creí que serías más rápida, idiota (Decía mientras le faltaba el aire)

Zula: Pero si te he hecho correr un montón!!

Bakugo: Quisieras

Zula: Volvamos a dentro, no queremos pescar un resfrío

Bakugo: Si me llegó a enfermar, tu tendrás la culpa

Ambos entraron y subieron al elevador, ahí fue cuando Bakugo le preguntó:

Bakugo: Por qué saliste, tonta? A caso quieres resfriarte?

Zula: Salí sin pensarlo, cuando era niña siempre quise jugar con la lluvia

Bakugo: PUES A LA PRÓXIMA LA PIENSAS DOS VECES. A quién se le ocurre salir de esa forma???

Zula: Buenoo... Aunque debes admitir que fue divertido

Bakugo: ......... tal vez

Zula: Qué dijistee??? No escuche bien, podrías repetirlo??

Bakugo: Ya basta

El elevador llegó a su piso y el se bajó.

Zula: Hasta mañana, rubia (le sonrió)

Bakugo: Mh (Dijo mirando al suelo, que en su idioma eso significaría algo como "igualmente")

Antes de que las puertas cerraran, Bakugo volteó a ver a Zula por una última vez, ella se veía tan linda. Sus ojos eran igual de preciosos que siempre y su cabello estaba completamente mojado, y aunque estuviera haciendo mucho frío, sus mejillas estaban tiernamente rosadas. El quería seguir con ella, quería escuchar su voz, su risa, quería que ese tipo de momentos durarán más tiempo. Lo pensaba tanto que se volvía molesto. De verdad se veía muy hermosa en esa noche.

Bakugo volvió a su habitación, se secó y se cambió de ropa. Después se recostó en su cama mirando al techo. Seguía pensando en ella, no podía evitarlo. Intentaba pararse a sí mismo pero todo era en vano.

Bakugo: *Vine aquí para convertirme en el maldito héroe número 1, no para este tipo de estupideces... MIERDA PERO, ¿POR QUÉ PUEDE LLEGAR A SER TAN PERFECTA??? Sus ojos son tan suaves y gentiles, pero a la vez tan firmes?? Podría mirarlos todo el día... Su cabello, me encanta, está tan desordenado todo el tiempo y por alguna razón le queda perfecto. Es la única persona en el mundo que podría verse tan bien con eso, y su voz... su voz es hermosa, de una manera que no puedo explicar... y no me hagas hablar de su personalidad, no es como ninguna otra, a dónde quiera que vaya, todos la escuchan de inmediato, se preocupa más por las personas que ama que por ella misma, y su firmeza al momento de actuar emana confianza a los demás, siempre está atenta a los detalles más pequeños y es la primera en responder a las preguntas más difíciles, que molesta es. No hay forma ni palabras para poder decir lo perfecta que es esa idiota. Ella siempre esta tan emocionada por conocer cosas nuevas y le encuentra belleza hasta a lo más pequeño e insignificante. Me agrada pasar tiempo con ella, quiero pasar más tiempo con ella. Mierda, quiero estar cada segundo del día con esta maldita rara... No quiero estar enamorado, no puedo. No lo haré... Me olvidaré de este sentimiento, no dejaré que se interponga en mi camino. MALDITO CEREBRO DE PORQUERÍA, PARA YA DE UNA VEZ* (Comenzó a golpearse muy fuerte la frente contra la pared)

Su cabeza era un desastre, y aunque le diera tantas vueltas al asunto el sabía muy bien lo que sentía. Después de un rato, al fin, consiguió dormir.