Amor y holocausto

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Pase la noche más larga de mi vida, dormida a un costado de el, por suerte el acto no duró mucho, a la mañana siguiente no tardo mucho en echarme de la habitación pues el tenía que arreglarse para cumplir con sus obligaciones, me fui a la mía, me metí a la tina para ducharme, pues aunque era mi esposo me sentía sucia, relajada en la tina mire hacia el techo recordando como fue nuestra boda, me veía preciosa no es por nada pero ese vestido perla me quedaba divino, en mi cuello un collar hermoso, mis labios rojos y mis ojos llenos de júbilo por haber unido nuestras vidas, haber entrelazado nuestros destinos en un mismo, pero como olvidar las palabras de mi tía "Agnes mi niña, al fin te me casas, con un gran hombre; honorable, valiente y de buena familia""Claudius es perfecto para ti"Eso parecía ser "el era perfecto para mi"
No paso mucho tiempo cuando sus malos tratos comenzaron a ser cada vez más cotidianos y mi amor cada día que pasaba se convertía en miedo hacia el.
- Agnes ¿te encuentras ahí?
- si Claudius ¿se te ofrece algo?
- sólo para recordarte que hoy se reunirán las esposas de los comandantes y tienes que ir.
- si, esta bien.
-........

Me arregle para convivir con aquellas señoras, no me agradaba ir pues eran demasiado racistas y a demás estaban a favor del campo de concentración, Claudius me había comentado algo sobre ello, creo que torturaban ahí a personas judías con el fin de exterminar a "esa raza" familias enteras asesinadas cruelmente, todo por pensar diferente, pero ese era el trabajo que nos daba de comer, tenía que aprender a ser fuerte.