Capítulo 2 "Una promesa fallida"

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-¿¡Que fué eso!? ¡Rogger! ¿¡Que dijiste!?.-

-Temo que L ah muerto.- Dijo bastante apenado y triste

-¡¿Ah muerto?! ¿¡Pero... Cómo!?.- Rogger quien empezaba a sentirse un poco incómodo de la situación, no deseó responder aquella pregunta, soltando solamente un leve suspiro.- ¿¡Fué Kira!? ¿¡Kira lo mató!? ¡Rogger tienes que decirme!.- Mello se había acercado casi por instinto al escritorio de aquel que administraba la institución en la que se encontraban.

-Probablemente...- dijo el hombre por lo bajo aún más apenado e incómodo.

-¡Pero me prometió encontrar a Kira y ejecutarlo! ¿¡Y ahora dices que está muerto!?.- Respondió al instante aquel chico imperactivo de cabello rubio rojizo, tomando al pobre hombre de la ropa con fuerza y cierta velocidad.

-¡Mello!.- Rogger regañó levemente a Mello, haciéndole saber que su comportamiento no era el adecuado.

Al instante que este haya regañado a su alumno. Se escucharon varias piezas caer por dónde estaba Near sentado.

Near había tirado las piezas de su rompecabezas para que se controlaran, tomando así toda la atención de los dos, en especial la de Mello.

-Si no puedes ganar el juego, si no puedes resolver el acertijo. Eres un perdedor.- Dijo esté mientras volvía a colocar las piezas en su lugar.

-Y... ¿¡a quien escogió L!? ¿¡A mí o a Near!?.- Dijo Mello totalmente interesado en este tema, pues era lo que más le aquejaba desde tiempo atrás.

Rogger se quedó un momento en silencio, dudando un poco si decirle la verdad o no. -No había escogido aún y... ahora que no está, temo que no podrá hacerlo.-

Mello se quedó plasmado ante tal respuesta. No sabiendo que hacer ni que decir, solo dió un paso hacia atrás para apartarse.

-Mello, escucha. También tu Near. No pueden trabajar juntos.- Esto enfureció más a Mello, gruñendo al momento que dijo esto.

-De acuerdo, suena bien.- Expresó Near de manera fría pero a la vez un poco aliviada por esta respuesta de su tutor.

Mello al instante que su rival mencionó esto. Sus ojos se llenaron de bastante furia, molestia y hasta un poco de envidia.

-Nunca funcionará Rogger, no podemos hacerlo juntos. Sabes que no me llevo bien con Near. Siempre competimos el uno contra el otro, siempre.- Expresó aquel chico, con ahora bastante molestia por la situación.- ¿Sabes qué? Está bien. Near debería reemplazar a L. No es como yo, no tiene emociones. Solo usa su mente como si fuera un juego o un rompecabezas.- Mello con bastante molestia y decepción, admitió aquello que no tenía y le era algún tipo de debilidad. Rogger en cuanto su alumno empezó a decir esto, levantó la mirada hacia Mello un poco alarmado. -En cuánto a mi, me voy de esta institución.- Dijo este para después darse la vuelta e irse.

-¡Mello! ¡Espera!.- Gritó al mismo instante que se levantó de su asiento, para intentar detenerlo.

-No digas nada. Ya tengo 15 años. Es hora de que viva mi propia vida.- Mencionó aquel, cerrando la puerta luego de haber terminado de decir lo que pensaba.

Rogger fué tras Mello hacia la puerta, quedándose aún sin salir totalmente de su oficina. Le gritó varias veces "¡Mello! ¡Espera! ¡Mello!"

Near se quedó callado, mirando la nada mientras ponía cierta atención a lo que ocurría.
El era ahora el sucesor oficial de L y al que le tocaría llevar el caso que mató a su mentor.

-Rogger no se sienta mal; Mello sabe cuidarse solo. Estará bien.- Dijo aquel niño blanco, quien siguió sentado en su mismo lugar ahora jugando con uno de sus mechones. -No debemos centrarnos ahora en niñerías como esa. Tenemos cosas más importantes que hacer.-

La primavera que jamás llegó. (Near y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora