14. Jimin

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Había olvidado lo horrible que era estar en la calle. Le dolía el pecho de solo pensar que la única persona en la que confió le había engañado de una manera tan horrible.

Jimin observaba aquel puente tentándose a saltar para terminar con su vida de una vez. ¿Qué iba a lograr estando solo?

Su hijo nacería y tendrían que seguir en la calle. Lamentaba tener que traer al mundo a un pequeño solamente a sufrir.

A lo lejos escuchó unos pasos, su corazón le latió demasiado.

—¿Tae? —preguntó. No sabía si era él, pero mentiría si dijera que no quería que fuera él. Jimin lo extrañaba demasiado y quería volver a verlo. Quizás podían solucionarlo, aunque él dijo que le había gustado aquella infidelidad, posiblemente ya no haya arreglo.

¿Qué más daba si se moría? Habían pasado cuatro días desde que salió de casa, ni siquiera Taehyung había intentado detenerlo.

El mundo es un lugar cruel, Jimin ya no quería seguir siendo víctima de esa crueldad.

«mucho tiempo atrás»

Jimin había corrido después de recibir un golpe de parte de su padre, la razón era tan vergonzosa que ni siquiera quería pensar en ella. Uno de sus clientes se quejó porque Jimin había usado sus dientes.

“El niño experto no es tan experto” había dicho aquel hombre.

Jimin ya no sentía que iba a salir de ese lugar, a dónde fuera, a dónde se escondiera, su padre siempre lo iba a encontrar. A veces se preguntaba si ese hombre era su familiar. Desde que tenía uso de razón lo había humillado y maltratado. Jimin quería morirse.

Sacó la cajetilla de cigarros que le robó a uno de los hombres que llevaba su padre. Jimin con trece años ya era un fumador. Sus piernas le temblaban y su delgado cuerpo le dolía.

Debajo de sus ojos estaban enormes bolsas debido a sus pesadillas que no lo dejaban dormir. Estaba tan cansado, el día anterior había ido un médico a revisarlo, siempre que iba ese hombre, lo ponían a dormir y cuando despertaba era con mucho dolor.

Pero no era una clase de abuso sexual, él conoce ese dolor. Este dolor era diferente y lo hacía sangrar incluso por días. Justo como ahora. De su ropa interior bajó un hilito de sangre cayendo hasta el suelo.

No le importaba si fuera peligroso, su vida ya era una tortura.

[...]

Sabía que jamás saldría de ese lugar si no hacía algo al respecto. Después de pensar en toda la noche, decidió hacerlo.

Iba a escapar.

Para asegurarse de que todo saldría bien, debía deshacerse de la cabeza detrás de todo. Debía matar a su padre.

Todo el plan era perfecto, al día siguiente iba a correr mucha sangre.

La mañana siguiente parecía ir normal. Desayunó su avena de todos los días mientras su padre hablaba por teléfono con algunos hombres con los que estaba haciendo negocios. Vendiendo a su hijo, claro.

Jimin observó la botella de alcohol. Si quería acabar con todo debía hacerlo bien.

Tomó la botella y se levantó en silencio, su padre anotaba unos nombres en una libreta y Jimin se aproximó a él por detrás.

Podía sentir su corazón latir con rapidez y sin pensarlo dos veces le estrelló la botella a un costado de la cabeza.

Su padre, mareado, se levantó con torpeza y su hijo con lágrimas en los ojos lo apuñaló varias veces en el pecho con la botella cortada.

Con mucha fuerza y odio presionaba aquella botella llenando de agujeros a su padre.

Se levantó sin poder creer lo que había hecho. Lanzó la botella y tembló observando el cuerpo muerto.

No pensó más y huyó de aquella casa.

[...]

Sólo había salido con un suéter para el frío, pero nunca pensó que las noches serían mucho más frías.

Refugiado en uno de los trenes abandonados. Jimin debía encontrar qué hacer para sobrevivir, si seguía así, posiblemente muera, por lo que decidió comenzar a robar para sobrevivir y debía encontrar un lugar más seguro, posiblemente el edificio abandonado. Había escuchado que estaba embrujado, así nadie se acercaría a él.

«Actualidad»

Jimin miró a una mujer pasar de largo y se decepcionó de que no fuera Taehyung.

—Otra vez soy solo yo —dijo con la voz quebrada y después miró a su vientre—. Somos —se corrigió y sonrió.

Iba a regresar al puente donde estaba durmiendo, pero la presencia de alguien le hizo detenerse.

Taehyung estaba parado mirándolo. Jimin se quedó sorprendido por unos momentos y después regresó en sí y se dio la vuelta para no cruzarse con él.

Jimin avanzó y Taehyung también.

—¿Qué quieres? —preguntó.

—Jimin, cometí un error —dijo Taehyung—. No lo pensé, pero tenía miedo de que te hicieran daño.

—Está bien, puedes regresar a hacer tu vida, posiblemente seas más feliz con alguien que esté limpio y que no tenga que cargar con su pasado.

—Jimin, no estás escuchando —Taehyung se acercó más, pero del otro lado alguien chocó con él. Jimin emitió un gemido y antes de ver a la persona vio a Jimin encogerse mientras lloriqueaba—. ¡Jimin!

Se acercó más y lo abrazó, Jimin se dejó caer en sus brazos. Tocó su vientre y levantó su mano la cuál estaba sangrando.

—Mi bebé —dijo poniéndose pálido.

—No —susurró Taehyung y lo abrazó llorando.

—Tae —Jimin se sentía confundido como si estuviera a punto de perder la conciencia—. Voy a morir —Taehyung negó con la cabeza—, salva a mi bebé. Salvalo, por favor.

Taehyung cargó a Jimin y corrió directo al hospital.

Kill me ✄ VMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora