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Su respiración se encontraba agitada, había corrido por mucho tiempo y sus piernas estaban a punto de fallarle. Salió del trabajo mucho antes de que terminara su jornada cuando recibió la llamada de un Denki llorando y quejándose de dolor diciéndole que iba al hospital más cercano de donde vivían.

Ahora estaba en un pasillo blanco esperando a que alguien saliera de la sala de partos que estaba ocupada, se sentía nervioso y pasaba sus dedos por las hebras de su cabello, sabía que algo iba a pasar, lo había presentido esa mañana y lo había ignorado.

Después de un rato más vio como trasladaban a Denki a una habitación y una manta amarilla se iba hacia el lado contrario, hacia el área de cuidados para un bebé. Siguió a los doctores que le repetían que todo había salido bien y que el bebé estaba sano y que lo traerían en un momento en lo que la enfermera le revisaba algunas cosas. Después de eso se quedaron solos en un silencio tranquilo.

-¿Qué tal?
Arrastró una silla hasta la orilla de la cama en donde se encontraba Kaminari que se veía bastante cansado.

-Duele como el infierno, te recomiendo no tener hijos.
El pelimorado río ante aquel comentario y posó su mano derecha encima de la de Kaminari.

-¿Lo viste?
El chico asintió sonriente, una sonrisa que iluminaba la habitación y sus ojos dorados que lo veían con mucha alegría.

-Me dejaron cargarlo un momento, es pequeño y es un niño.
Los dos se sonrieron mutuamente, Hitoshi le acarició la mejilla y le quitó un mechón que le caía en el rostro -. Ya quiero que lo veas y puedas cargarlo, es muy bonito, huele a nuevo - el pelilvanda no pudo evitar reír ante la ocurrencia de aquel rubio.

-Pareces un niño estrenando zapatos.
Denki iba a replicar algo cuando una alarma sonó en todo el edificio del hospital. Hitoshi miró un momento a Denki y este le devolvió la mirada preocupado -. Deja ver qué está pasando.
Se soltaron de la mano y Hitoshi salió rápidamente a ver qué era lo que pasaba, algunos pacientes de igual manera se levantaron para observar qué pasaba entre los pasillos hasta que una enfermera pasó por delante de él -. Disculpe, ¿qué es esa alarma?
La señorita se veía nerviosa, pero al verlo a los ojos trató de enderezarse y parecer lo más de piedra que podía.

-No es nada, vuelva a la habitación, sólo un problema que pronto se solucionará.
Lo dejó mirándola en medio del pasillo, tratando de convencer a todos que no pasaba nada y que volvieran a descansar, pero algo lo tenía inquieto. Volvió al cuarto donde se encontraba Denki viéndolo con ojos asustados.

-No es nada, dicen que sólo un pequeño problema que solucionaran pronto.
Pero Denki parecía a punto de llorar.

-Ya se tardó la enfermera al traer al bebé, ¿podrías ver si ya viene?
El chico asintió y antes de pararse entró un doctor y una enfermera sin ninguna manta amarilla entre sus brazos -¿Y mi bebé?
Denki buscaba ansioso con la mirada. Doctor y enfermera se miraron y después miraron a Denki con una expresión que no dejaba ver ni un sentimiento.

-Ha ocurrido un problema, el bebé se lo llevó una enfermera que no era de esta institución, pero ya llamamos a las autoridades y...

Borroso, Denki empezó a ver todo borroso y en sus oídos no sonaba más que un zumbido que lo hizo caer en la cama, ni si quiera pudo escuchar cómo Shinso peleaba con el personal de medicina por su incompetencia y después con el personal de seguridad por no haber hecho bien su trabajo.

Y todo en un segundo se esfumó.

Su familia.

Su hogar.

Sus sueños.








Muchas gracias por leer esta pequeña historia. No estaba segura si dejarla con un final abierto pero creo es lo mejor jajaja
Espero les haya gustado mucho 🌼

Hasta que todo se solucione || ShinkamiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora