Capítulo Siete.

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"Compañeros"

¿Quién lo diría? Una risa escapó de Fluke

Pasaron la noche en la gran cama del alfa, tanto Ohm como Fluke se encargaron de abrazar un cachorro. Ohm a Christopher y Fluke a Félix.

Después de lo ocurrido con el menor, se dieron cuenta de que lo que vió fue la sombra de un árbol (Ohm ya mando a quitar) que se proyectaba tetricamente por la ventana. Y teniendo en cuenta el casi exitoso secuestro, el segundo intento en la casa de Fluke. Es entendible que Félix este nervioso con su entorno.

El resto de la noche fue tranquila. Los cuatro cayeron rendidos en la cama a causa de una larga e interesante noche.

🐻

Ohm fue el primero en despertarse. Repaso a los cachorros para comprar que estuvieran tranquilos y fijo su vista en su compañero.

Compañero.

Fluke Natouch.

Finalmente llegó el día en el que encontró a su compañero. Más bien sus cachorros lo encontraron por él.

Saliendo de la cama fue a tomar en brazos a Fluke para sacarlo de la habitación. Su Conejito aún dormido se recostó en su pecho.

Fuera de su habitación se dirigió a la de invitados.

Con paciencia acaricio los mechones castaños de Fluke para despertarlo. Dejo pequeños besos esquimales por el rostro. Y un millón de mimos más para despertar a su compañero

🐻

Fluke despertó con la sensación de cosquilleo en su rostro.

Abrió los ojos y vio la fuente. Ohm estaba apoyado en su brazo mientras le hacía caricias. Con todo su aspecto de recién levantado y una sonrisa dulce.

Sonrojandose a más no poder. Fluke se oculto entre las mantas.

–Buenos días, compañero -una voz profunda y vacilante, como si estuviera probando las palabras llegó a él.

Solo atino a enterrarse más aún en las mantas y almohadas causando la risa ronca del alfa.

–¿No piensas responderme, compañero? -si antes la voz estaba dudosa ahora era completamente burlona.

Tragando su vergüenza para evitar su orgullo sea herido respondió:

–Buenos días. -sencillo, corto y si no fuera por su rostro rosado y que evitaba mirar a Ohm, hubiera funcionado. Se ganó otra risa.

–Creo que ya sabes lo que sucede... ¿O quieres que te lo explique? -a pesar de todos los días que pasaron juntos, es la primera vez que Fluke presencia esta etapa burlona. Y le gustó.

Huyendo de su escondite preparado para discutirle, noto que no estaban los cachorros. –¿Dónde estamos?¿Chris y Lix?

–Ouch, siendo ignorado a causa de mis propios hijos por mi compañero. ¿Cómo debo sentirme?. Estamos en la habitación de invitados, los cachorros están en mi habitación. Te traje aquí porque pienso que deberíamos hablar antes de que se despierten.

–¿Hablar? -Fluke se hizo el desentendido.

–Si, hablar -el alfa le siguió el juego- ya sabes, de que tu aroma y el mío coinciden. Lo que nos convierte en compañeros.

Bueno, era hora de hablar.

Analizando la situación; sus hijos amaban a Fluke y se podía apreciar que el amor es mutuo. La madre de sus cachorros no existe en sus vidas, algo que el alfa se encargó de aclararle a Fluke: la historia de siempre, alfa obligado a tener cachorros para asegurar desendientes. Solo habría que agregar el dato de que la "madre" se fugo con su supuesto compañero que no quería encargarse de hijos de otro.

Fluke no tenía problema en adaptarse en el hogar y manada de Ohm, siendo el alfa, le es imposible vivir en otro lugar. Agregando el hecho de que la casa del Conejito fue destruida y aún no se encuentran los culpables, Fluke estaría bien en formar un hogar aquí.

Se relacionaba de maravilla con la manada, nunca hubo queja alguna de ninguna parte.

–Laboralmente pediste una licencia indefinida, sin goce de sueldo -llevaban un par de horas se charla- podrías dejar ese empleo y trabajar en el hospital de la manada o abrir su consultorio. O cualquier cosa que quieras hacer -Ohm ofreció.

–Umm, creo que podría tomarme un tiempo de descanso del trabajo. Tengo más que suficientes ahorros para vivir cómodamente unos años al menos, mientras me acoplo al estilo de vida de por aquí.

–El dinero no es problema, todo lo mío es tuyo Conejito.

–Gracias, pero he trabajado duro por mis cosas siempre. Y como dijiste "todo lo mío es tuyo", se aplica en ambos sentidos. Somos una pareja. Dos personas que se ayudan mutuamente en todos los aspectos. Nada de dar mucho y no recibir nada. Ambos daremos y recibiremos lo mismo. De eso se trata una relación, ¿qué piensas? –pregunte. Ohm pareció sorprendido por las palabras.

–Yo... está bien Conejito -pequeñas lágrimas se acumularon en las esquinas de sus ojos cafés. Ohm atrajo el cuerpo de Fluke hacia él para abrazarlo ya que seguían rescotados.

Se mantuvieron unos minutos así. Abrazándose, sosteniéndose, aclarando sus mentes de todo lo hablado.

Ohm rompió el silencio.

–Siento... siento mucho que tengas que dejar todo atrás. Tu empleo, tu hogar, tu manada, tu familia, amigos... -Fluke lo sostuvo más fuerte- quizás... si no fuera el alfa podríamos sacrificar cosas los dos, no solo tú.

–Shh. No es tu culpa, para nada. No me siento obligado a dejar atrás nada. ¿Mi trabajo? Puedo conseguir otro, era solo un empleo. ¿Mi hogar?¿Te refieres a la casa que fue destruida, en la cual vivía solo con mi colección de tazas? -Ohm asintió en su cuello- era una casa, Ohm, no había nada que me importará, únicamente mi colección y ya. No tenía sentimientos ni recuerdo allí. Mi manada, familia y amigos... siempre puedo ir a visitarlos y ellos a mí. Existen las llamadas, mensajes, correos electrónicos si quieres ir a la antigua -nos reímos del mal chiste.

»¿Dejar eso a cambio de estar con mi compañero, dos maravillosos niños que adoro, un hogar lleno de risas cuando me levanto, me voy a dormir, o llegó? -fue el turno de Fluke de reír solo- al contrario, creo que fui yo quien te quite la oportunidad de huir de este lugar bromeó Fluke.

»No pienses eso más, te lo ruego como tu amigo, como el desconocido que te grito a través de una llamada y cuido a tus cachorros, pero sobre todo, lo hago como tu compañero y Fluke. Dos palabras para llamarme a mi mismo, una persona que está muy cerca de caer completamente enamorada de ti.

Si antes Ohm no estaba llorando, ahora lo hacía. En los brazos de su Conejito, dejo libres todas las lágrimas. Acompañado del tenue aroma de Fluke y suaves caricias, Ohm se relajó. Y decidió.

–Conejito, déjame cortejarte.

–Me parece bien, podemos hacerlo juntos -besó la mandíbula del alfa.

Volviendo a sorprenderlo. Iba a ser como Fluke dijo:

Algo mutuo.

Félix navidad y año nuevo <3

No hay excusas, solo mucho estudio, pocas ganas de vivir y falta de inspiración. Si quieren saber más, pregunten 55555

Muchas gracias por seguir leyendo las cosas que escribo 🤧🤧

Red

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⏰ Última actualización: Dec 31, 2021 ⏰

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Dos Cachorros y su Conejito »OhmFluke«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora