Desafíos del Amor//EDITANDO

Decaída... Un amor comienza.

Ámbar ve como se aleja el auto a gran velocidad a quien sabe donde.
Entra a la casa y encuentra a la mamá viendo televisión.

-Hola cariño ¿Y Noah?- La mamá estaba extrañada que ella haya entrado sola.

-Él se ofendió conmigo y me baje del coche. Pensé que se iba a bajar, pero aceleró - La voz de Ámbar se quiebra.

- ¡Oh! Eso pasó aquella vez - Lo dijo en susurro.

- ¿Aquella vez? - Dijo Ámbar con cara de no entender - ¿Cómo?

-Nada, anda a dejar las cosas a la pieza - La mamá se va a la cocina.

Entro a la habitación de Noah y se puso a ver las paredes con todos los dibujos de él.
No dejaba de imaginar qué sería lo que ocurrió aquella vez. ¿En dónde estaba Noah? Lo único que se preguntaba. Se sentía culpable. Quizá si hubiera sido más tierna, demostrar sus sentimientos o tan solo contarle lo que pasó con Netan, quizá todo hubiera sido mejor .
Pasan las horas y llega la hora de comer, no hace más que revolver la comida con el tenedor. Justine estaba en la casa de una amiga, la mamá sirvió la comida y se acostó en su pieza y estaba solo con Jason.

- Y vos... te llamás...-Pregunta para crear un tema de conversación y la cena no se tornara incómoda.

-Ámbar - No le saca la vista al plato.

-¿Sos la nueva novia de mi hermano? - Pregunta Jason.

- ¿Nueva? Y no, no soy la novia - Responde Ámbar.

- ¿No te ha contado? -Se pone nervioso al creer que se había metido en problemas- Hace un año y medio que salió de una relación problemática.

-No, no sabía - Sigue jugando con el tenedor- Problemática ¿Por qué?

-La chica, Stephany, no le prestaba mucha antención, él era todo amor con ella. Parecía que solamente lo quería para jugar, y cuando cortaron mi hermano cayó en... -Hizo una pausa.

- En...- Ámbar lo queda mirando.

-Perdón, no suelo hablar mucho y cuando lo hago digo cosas que no tendría que decir -Levanta su plato y se va.

Ámbar se queda unos minutos mirando su plato, lleno de comida, lo lava y se va a la habitación de Noah.
Se acuesta para dormir, ya que al día siguiente tenían clases.
Ámbar se asusta al escuchar el ruido de la puerta, ve su celular y eran las 3 am, abre un poco la puerta de la pieza y la ve a Jesabelle hablando con Noah.

-¿Dónde estabas? - Grita la mamá de Noah.

-Tranquila Jesy - La abraza.

-¿Tranquila? ¿Cómo puedo estar tranquila si desapareces así de la nada? - Lo empuja.

- Emm... yo... - Noah, borracho, no puede armar una oración coherente.

-¿Volviste a tomar? - Los ojos de la mamá se ponen llorosos - Tenes mucho olor a alcohol ¿Otra vez? ¿A dónde fuiste?

- Déjame... en... paz... - Iba de camino a la habitación cuando se tropieza con el escalón.

-¡NOAH!-Grita la mamá y sale corriendo a ayudarlo -Vamos a bañarte.

Ámbar no entendía la frase que había dicho la mamá "¿Volviste a tomar?" Pensaba que era uno de esos chicos el cual odiaba las bebidas.
La casa estaba en completo silencio que podía escuchar lo que hablaba la mamá con Noah.

-¿Por qué volviste a tomar? - Pregunta la mamá mientras le abre la ducha.

-No te importa - Dice sacándose las zapatillas.