~Parte 8~

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Noviembre 2019.

Solo unos días bastaban para ser tres de diciembre, así que llegaría el día de su primer aniversario.

Wang Yibo quería que fuera especial, y quería celebrarlo junto a él en un lugar público, y luego pasar un fin de semana con él encerrados en su apartamento. Esta vez el menor no quería esconderse, pero tampoco sería evidente. Solo quería cenar en un restaurante con un amigo como una persona normal.

Solo había un problema, su hermana mayor había decidido venir unos días con su sobrino para visitarlo. Le encantaba pasar tiempo con su pequeño sobrino, y con ella, pero eso dificultaba un poco las cosas. No iba poder desaparecer por todo un fin de semana sin darle alguna explicación creíble que no involucrara trabajo.

Esos días con su hermana eran realmente agradables. Ahora estaba mucho más activo en su cuenta de Weibo publicando imágenes y videos junto a su sobrino y su hermana. Una hermosa familia feliz.


Diciembre 2019.

La noche esperada por el menor finalmente había llegado. Una sencilla cena con uno de sus amigos. Su ropa era casual, y ocupaba gorra y tapa bocas como de costumbre. Llego al restaurante y solo debía esperar al mayor.

Los nervios lo estaban consumiendo. Trataba de verse tranquilo, sin embargo, miraba su reloj cada dos minutos. Pasaron diez minutos y el mayor no había llegado, así que para despejar la mente y no pensar de más, saco su móvil y empezó a jugar.

—Joven, disculpe, ¿aún no va a ordenar?

El menor alzo la mirada de su celular y miro el reloj. Habían pasado otros diez minutos. Estaba tan sumergido en su juego, que no se había dado cuenta que había empezado a llover.

—En cinco minutos —respondió. El mesero asintió y se marchó de nuevo.

Wang Yibo se preocupó y cuando estuvo a punto de llamarlo, este entro y lo busco con la mirada, cuando lo vio en la mesa camino hacia él y se sentó en frente.

El menor abrió sus ojos y trago saliva al verlo, pero luego sintió pena por él.

—¿Qué te pasó?

—Hoy no es mi día —hizo un puchero—. No creí que fuera a llover, no vi el pronóstico del clima, pero hoy parecía ser un día agradable. No traje paraguas conmigo.

El menor se quitó su polera y se la paso al mayor.

—Cámbiate primero. Puedes enfermar, además no creo concentrarme si estas así frente a mí.

Xiao Zhan tomo la polera y camino hasta el baño. Un momento después el menor se levantó y fue tras él sin que se diera cuenta.

Traía puesta una camisa blanca de magas largas, y aunque tuviera una camiseta sisa blanca por debajo, la lluvia había hecho que se hiciera casi transparente y se pegara a su cuerpo. Su cabello estaba mojado y las gotas caían de los mechones de cabello.

Se miró en el espejo del baño, las gotas resbalaban por su rostro como el sudor. Tomo varias toallas de papel y seco el área de su clavícula que estaba expuesta, su cuello y rostro.

Xiao Zhan miro hacia abajo desapuntando su camisa, cuando escucho una voz desde la puerta.

—¿Necesitas ayuda?

El mayor miro a través del espejo, viéndolo recostado en el marco de la puerta mordiendo su labio inferior—Yibo, vuelve a la mesa. ¿Qué haces aquí?

—Te vez tan sexy —dijo con voz grave y rasposa.

—¡Oh! No uses ese tono conmigo que no funcionara ahora. Vuelve a la mesa.

Algún día. [Fanfic corto]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora