T R E I N T A Y U N O

166 26 29
                                    

Para mejor ambientación, reproduce Serendipity – Jimin.

Acarició su piel moviendo sus manos de arriba hacia abajo, comenzando a repartir pequeños besos sobre sus clavículas, el jengibre cada vez se iba compenetrando más con el jazmín, formando un aroma que sólo ellos dos podían disfrutar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Acarició su piel moviendo sus manos de arriba hacia abajo, comenzando a repartir pequeños besos sobre sus clavículas, el jengibre cada vez se iba compenetrando más con el jazmín, formando un aroma que sólo ellos dos podían disfrutar.

BonHwa ladeó su cabeza dándole más espacio para que Jimin siguiera besándole, él notó algunas cicatrices en su piel que la cohibían, así que también se encargó de besarlas con delicadeza, caminó hacia atrás de ella en búsqueda de quitar las vendas de sus pechos, poco a poco la fue desenrollando hasta que también la tiró al suelo.

Regresó al frente y esta vez enrolló su brazo en su cintura besándola en los labios, BonHwa tomó la iniciativa de colocar su mano en la nuca del alfa acariciando su sedoso cabello castaño, un jugueteo en sus bocas se fue desarollando, además de algunas mordidas suaves y pequeños gemidos que se escapaban de sus labios.

Jimin la guió hasta recostarla en la cama, poniéndose sobre ella sin lastimarla o aplastarla, lograron separarse debido a la falta de aire y posteriormente se vieron fijamente a los ojos mostrando una pequeña sonrisa, ambos estaban sudorosos, con la respiración agitada y sus ojos brillantes, cada uno con su color característico.

Se sentían plenos, llenos de pasión, deseo y excitación, sin dejar de lado que ellos estaban considerando aquel acto como la consumación de su amor después de tanto sufrimiento.

BonHwa desató el nudo del pantalón de Jimin para facilitar el proceso, copiando este último la acción, hasta el punto que quedar totalmente desnudos. Las caricias y los besos seguían sin parar, el alfa trataba de que su celo no lo dominara por completo porque quería que fuese momento especial y que pudiera disfrutarlo como ser humano, no como alguien que solo busca satisfacer sus deseos sexuales.

Con sólo verse a lo ojos sabían que estaban listos para proseguir, así que en un movimiento suave y lento, el castaño introdujo su miembro en la cavidad de la chica, no iba a negar que le había dolido como mil infiernos, pero los labios de Jimin sobre los suyos le hacían olvidar o al menos minimizar el dolor que sentía. Sus jadeos resonaron en esas cuatro paredes hasta que ambos llegaron a su punto máximo, culminando el acto con un último gemido en conjunto.

Jimin se recostó junto a ella, acunándola entre sus brazos mientras que ella colocó su cabeza en su pecho cubriéndose con la sábana, ambos se sentían distintos, avergonzados e incluso tímidos, así que el alfa tomó la iniciativa de romper el hielo.

—Eres tan hermosa – Jimin besó su cuello haciéndola reír – eres una obra de arte.

—No soy la gran cosa, Jimin – musitó entre los labios contrarios – sólo soy una mujer como todas.

—Por favor, deja de decir eso – acarició su piel durante algunos segundos para después dejar un pequeño beso sobre su cabeza – eres perfecta.

—Jamás creí que estuviéramos así – BonHwa sonrió – esto era tan lejano para mí.

Origins of Love » PJMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora