Verdades a medias

Capítulo #10 Espero que su arrepentimiento sea escuchado

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Puedo describir el resto de la semana como un viaje de montaña rusa por los cambios de humor de Cristal, en primer lugar porque ahora no es solo a mí a quien bombardea con insultos, Majo no merece cada desplate que le hace, ni mucho menos los insultos y malos tratos por parte de mi melliza.

Luego está el tema de Gunter Cevallos, a quien mi hermana enfrento hace tres días por seguirme a casa y por tener nuestros números telefónicos, a lo que él con toda la calma y confianza del mundo contesto que pidió nuestros números a la consejera del colegio, porque quiere que lo ayudemos con la clase de geometría y es un país libre y él puede ir a donde quiera

Evidentemente a mi hermana no le hizo nada de gracia, por lo que sin duda ahora Gunter Cevallos está en su lista negra, justo antes de Majo y el profesor Galeano

No puedo decir que el joven profesor sea un entrometido o tenga una razón especial para desagradarle a mi hermana, es solo el hecho de que a Cristal le desagrada todo el que pueda acercarse demasiado a nosotras, como para encontrar un punto de quiebre o una grieta entre lo que todo el mundo cree que es la verdad

Las subidas y bajadas del humor de Cristal me tienen esperando lo peor a cada segundo del día, ya sea dentro o fuera del colegio, ahora incluso tengo que bañarme cuando ella no está en la habitación y siempre hecho el cerrojo para tener un poco de tranquilidad

Justo como hago ahora, aunque compruebo a cada nada que el cerrojo esta puesto, tengo un nudo asentado en la boca del estómago a pesar de que debería estar relajada por estar en la bañera con sales olor cereza y agua caliente

Tengo la sensación de que si cierro los ojos por un par de segundos Cristal podría volver a tratar de ahogarme o algo peor, dejando un poco mi paranoia reclino mi cuerpo y tarareo "te quiero mucho" de rio roma

Tomo la esponja para enjabonarla, la paso por mi cuello, hombros y brazos, levanto una de mis piernas, para lavarla y luego la otra, me pongo de pie y paso la esponja por el resto de mi cuerpo.

Me giro hacia la ventana para ver la cicatriz en mi cadera derecha, aun es perceptible y no podría odiarla más

—Agh casi no tienes trasero

Me doy la vuelta al escuchar la voz de mi hermana y me sumerjo una vez más en la bañera al verla frente a mí, aún está en pijama y con los brazos cruzados

—Aunque tienes mejores pechos —se pone de cuclillas para quedar a mi altura — ¿recuerdas que hacíamos eso?, decir que cosa queríamos de la otra ¿Por qué echaste el cerrojo a la puerta? Tuve que ir abajo por la llaves para poder entrar y no es la primera vez que la cierras

—¿Qué haces aquí? Me estoy bañando Cristal, un poco de privacidad por favor

—Me parece hermanita que la privacidad entre nosotras es algo relativo, te recuerdo que no hay nada oculto entre nosotras, apresúrate que yo también tengo que bañarme

Sale del cuarto de baño cerrado la puerta detrás de ella, adiós al fantasma de paz que he disfrutado durante un par de días, suelto mi cabello y paso el shampoo de frutos rojos por mi cabello, luego tomo la regadera de mano para terminar de bañarme, quito el tapón de la bañera y me envuelvo en la toalla para salir

Cris está sacando ropa interior de su armario y entra al baño, me siento en el taburete frente al peinador, humecto mi piel con crema corporal y cepillo mi cabello

Al deslizar el cepillo por mi lado izquierdo del rostro tengo que tirar un poco y un pequeño mechón de cabello se viene entre las cerdas del cepillo