Cartas sin remitente

Carpe Diem

Atormentado el pecho del joven

No sabe vivir sin el peso del mirar, de la chiquilla de ojos grises.

Quiere retenerla en el presente para que sea libre en el futuro.

No es así, mi querido amado.

Tan joven, inexperto en el arte de amar.

Joven que su pincel aún no recorre los mil colores que ofrece la vida.

Careces de locura en tu alma, pasión en tu amar y quieres amar con ataduras.

Ama con libertad y la locura de un amar sin cadenas.

Líbrate de las cadenas oprimentes del futuro

Ama el presente, porque el presente es el futuro y el pasado

Ríe con la chiquilla de ojos grisáceos, por que a lo mejor

Y el amor se escapa en un beso fogoso de otro amante.

Tu, hoy desperdiciando el tiempo oro que te brinda la vida a su lado

Querido amante, la vida se nos escapa, como el agua en el riachuelo,

Como la vida se desvanece, como la fragancia en tu camisa.

No temas amar, enamórate de la vida y los momentos, y de las personas.

Aunque significa darles la daga y esperar que no te den una estocada.

Con el tiempo y la sabiduría que llega con las canas, la resiliencia se apodera

Del alma del que algún día fue joven.

Y las reminiscencias llega, de algunas te ries apesar

En el momento, heridas abrieron y el cobijón de seda se mancho de sangre

De otras, olvidarás y te darás cuenta que no valía la pena en llorarlas.

Escucha el vals, el pasillo y danza con el cuerpo de tu amante,

Disfrutalo como y si fuera la última melodía que junto a ella, lo disfrutas.

Y si se va, ya llegará una nueva ilusión que robara los recuadros

Que pintas en tu imaginación, dejando en olvido a la primera dama que se fue sin explicación.

No vivas el futuro y disfruta el beso que le robas a la vida

Recorre el mundo que te ofrece la ilusión del presente,

Luego llegará uno nuevo, y tal vez amarás con más fervor y pasión singular.

Al final, todo es efímero, y se desvanece en tus manos. Solo vive en el mundo que se ofrece y ama sabiendo que: El amor debe ser sinónimo de libertad.