동~*'¨-ᴜɴᴅᴇʀ ᴛʜᴇ ᴛᴀʙʟᴇ-¨'*~방

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Desperté gracias a los gritos de mi madre, era molesto escucharla todos los días, suficiente tenía con que me levantará de esa manera para ir al instituto, ¿Que pecado cometí ahora para que no me deje dormir en paz un maldito sábado?

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Desperté gracias a los gritos de mi madre, era molesto escucharla todos los días, suficiente tenía con que me levantará de esa manera para ir al instituto, ¿Que pecado cometí ahora para que no me deje dormir en paz un maldito sábado?

- ¡PARK JIMIN, LEVÁNTATE YA! -grito mi madre desde la cocina-

- ¡YA ESCUCHÉ! -grite con el mismo tono y me levanté de la cama, salí de mi habitación y me dirigí a la cocina- Ya estoy, ya me levanté, ¿Ahora me podrías decir porque me despiertas tan temprano un sábado?

- Por que hoy vendrá mi compañero de trabajo a almorzar -me miro y sonrió regresando a servir los platos-

- ¿Compañero? ¿De que demonios estás hablando? -la mire con mi entrecejo fruncido-

- En primer lugar, cuida tus palabras jovencito y en segundo si, es mi compañero de trabajo, lo acaban de transferir entonces conversamos un poco, y lo invite a almorzar

- Mamá, es un desconocido, estás loca

- Más respeto niño, soy tú madre y puedo invitar a quién yo desee a mi casa, además, no le veo nada de malo, el guapo, buena reputación, tiene dinero y es muy apuesto -me volvió a mirar-

- Que asco, de seguro es un viejo que solo tiene plata -me cruce de brazos y la mire-

- No, el es muy respetuoso, tiene buenos modales y no es ningún viejo, es joven

- Si como digas, no me importa quién te guste y quién no, cada uno malogra su vida como quiere, iré a cambiarme -me dirigí nuevamente a mi habitación con la mirada de mi madre encima mío-

Me bañé rápidamente, tenía hambre hací que trate de acelerar más mi tiempo para desayunar de una vez, salí y me cambié, algo casual pero que por lo menos se vea presentable, siempre hay que dar una buena imagen.

Terminé por ponerme un pantalón color negro ajustado que claramente me hacía ver muy bien y una camisa más o menos ancha color blanco, me ví en el espejo.

Diablos, ¿Tan irresistible soy?

Baje a el comedor viendo que todo ya estaba servido y que mi mamá ya estaba desayunando, no dije nada y solo me senté a comer en silencio, uno muy incómodo.

- ¿A qué hora vendrá ese señor? -decidí romper el silencio, si que era incómodo-

- Estará aquí en tres horas -me miro-

- Está bien, de seguro no tarda en llegar

- Si, iré a alistarme, tú termina de desayunar -se levantó de la mesa-

- Claro, de eso no te preocupes -respondí mientras seguía comiendo-

(Tres horas después...)

Terminé de lavar los platos y ayudar a mi mamá a acomodar la mesa y en eso escuchó el timbre sonar.

- ¡Mamá! ¡Él ya llegó! -grite para que me escuchará ya que estaba en su habitación, camine hacia la puerta y la abrí dejando ver a un joven muy apuesto de tez perlada, labios delgados con cabello color marrón oscuro, me quedé mirándolo y el a mi, hasta que él me sonrió-

Papi『 ʏ.ᴍ 』🍓¡!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora