SEÑOR HANAGAKI || MITAKE

11

Takemichi observa con entusiasmo el primer partido de su hijo, se ha esforzado bastante en sus practicas y se nota bastante.

También se da cuenta de lo hábil que es su amigo, Manjiro taclea con mucha facilidad logrando liberar el camino para sus compañeros.

Los ha visto practicar algunas veces y aunque se regaña internamente por hacerlo piensa que el mas alto es bastante atractivo.

Y no parece ser el único en notarlo.

Las chicas de las gradas le gritan emocionadas, muchos gritos son para su hijo, pero la mayoría van dirigidos al mas alto y no pueden estar equivocadas, el chico es bien parecido, hábil y fuerte.

— Son muy buenos — dice una madre orgullosa — ¿Quién es el suyo?

— El noventa y cuatro — responde sonriendo.

— ¿Enserio? Creí que era el sesenta y uno — menciona pensativa.

— ¿Por qué?

— Bueno, lo observa demasiado o eso me parece, voltea para acá frecuentemente y es precisamente a usted, o bueno tal vez yo estoy pensando de más, por cierto, su hijo es buen corredor.

Takemichi asiente agradeciendo y se fija en el juego de nuevo, la idea que le dio la mujer de su lado no sale de su cabeza.

Es decir, Manjiro es quien lleva la camiseta numero sesenta y uno.

Se enfoca discretamente en el para saber si es verdad y en efecto, lo observa mucho incluso mas que Keisuke.

El mas alto nota la mirada sobre él, así que se quita el casco, revuelve su cabello un poco, mira fijamente a Takemichi.

Le guiña el ojo y sonríe.

El bajito mira a otro lado totalmente avergonzado, sus mejillas delatan como se siente, pero intenta convencerse que ese gesto fue para alguien más.

                     Takemichi

No debí hacer eso, no debí ceder, ahora tengo que cargar con la culpa.

Recuerdo todo lo que ha hecho por mí, desde no dejarme solo hasta los detalles que debe haber estado en el contexto correcto sabría que eran coqueteos.

Aunque tal vez siempre lo supe, no lo sé, no quería creerlo.

Pase una noche muy difícil intentando dar con lo correcto, no puedo corresponder un sentimiento tan fuerte como este, no creo que este enamorado por más que lo diga.

No es posible.

Me ve como una imagen paterna, es decir siempre lo cuide cuando Ken no lo hacia y solo mal interpreto las cosas.

No creo poder ir al trabajo, no quiero ver a Draken ¿Qué se supone que le diré? Disculpa la tardanza, tuve sexo con tu hijo y desperté muy tarde.

Me matara.

Paseo por mi sala dando vueltas tanto literalmente como en mi cabeza, tiene que haber un modo de hacerle saber a Manjiro que solo es una fase, que no está enamorado de mí, aunque ...

Lo extraño.

No me había dado cuenta, pero de verdad lo extraño y puedo compararlo por que cuando Kazutora se fue no me importo y lo que mas me duele de no hablar con Manjiro es que probable no volvamos a vernos ni hablar como lo hacíamos.

Y eso apesta.

                        Manjiro

— ¿Hola? — respondo el teléfono adormilado, el timbre fue lo que me despertó.

— Hola Mikey.

— ¿Keisuke? Vaya, hasta que me recuerdas — regalo sobando mis ojos — ¿Qué tal todo?

— Bien, bien supongo.

— ¿Pasa algo?

— He tenido problemas con mi padre, no sé, creo que es pasajero.

— Eso espero ¿Has hablado con Take ... Es decir ¿Con el señor Hanagaki?

— No mucho, sabes lo sentimental que es y buscara cualquier excusa para hacerme creer que tome una mala decisión, ¿Cómo ha estado?

— Deberías preguntarle tu.

— No ...

— Se supone que te fuiste por que eres un adulto, entonces compórtate como uno y deja de tratar a tu padre así — lo interrumpo antes de enojarme mas — Ha estado muy preocupado por ti y lo menos que merece es saber si su hijo esta bien.

                     Takemichi

No quiero pensar en eso, no quiero, pero mi mente juega en mi contra.

Me gusto la forma en la que me hablo, la manera en la que manejo mi cuerpo, pero antes de eso, las tentaciones, las visitas, los obsequios.

Creo que es la única persona que se ha interesado en mi de una manera tan cálida.

Ojalá no fuera tan complicado.

Escucho mi teléfono sonar y respondo esperando que sea Ken para preguntarme por que no fui a la oficina.

— Buenos días.

— Hola papa.

No puede ser.

— Ke-Keisuke, hola — saludo poniéndome de pie — Cariño, como ¿Cómo has estado?

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♡ Los números de Mikey y Keisuke son referencias a una era que tenia la banda, la canción se llama Love Me Right, se las recomiendo.  

♡ Ando un poco adolorida gracias a las inyecciones que me aplican, pero ando adelantando para que no se queden sin capitulo.

Gracias por leer, nos vemos en la próxima.

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