amor de una locura desesperada

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Aquella expresión tan vulgar de falta de amor, esa ansiedad degenerativa que te hace comer las uñas del corazón, ese traslúz fúnebre de amargura indescriptible, ese gusano que te come el cerebro, te hace hacer cosas que no deberías, te hace caer en los brazos equivocados; es un vicio sin oficio, un desquisio cineral que te envuelve y no te deja escapar, te rebajas, te dejas llevar de la locura y llegas a puntos que ni te imaginabas caer tan bajo, te desesperas, tu corazón aceleras y caes en un tu propio delirio de locura, exasperas, te comportas como ogro a quienes triunfan en el amor, prefieres no ser feliz y que los demás sufran a tu alrededor y empiezas a crear múltiples paranoias, y piensas que todo es un plan para enamorarte, pero al final te das cuenta y te dices a tí mismo...
"Las personas no son tan inteligentes".

Te desilusionas, sientes que tu mundo se derrumba, caes en los brazos de la gran amiga de la Soledad la depresión, caes, caes y solo caes, en una gran inmensa oscuridad eterna, un lugar triste pero acogedor, un lugar solitario pero sientes que es tan grande que no puedes escapar y no lo intentas.

Te vuelves a enamorar, pero no entregas por completo tu corazón con miedo a que lo rompan en mil pedazos, estas pero no estás, dices que nada te importa hasta que empiezas a amar, te asustas, te horroriza el sentimiento de querer, te gusta ser amado pero aunque ames no lo demuestras, tienes miedo de que si demuestras lo más mínimo de debilidad se aprovecharan de ti, te encierras en tu caparazón de rigidez y frialdad, pero por dentro estás tan blandito que te derrites, se oxida, se oxida tu armadura rígida de titanio; se rompe y derrite la pared de hielo que te impide amar pero con tu última jugada arrancas sin ningún sentido de suavidad lo que era tuyo, de la manera más insensible pero maquillada le dices a esa persona que no puedes amar, solo por que sientes que no puedes controlar lo que sientes y te aterra que cometas un error y que jueguen con tus sentimientos, pero al final te das cuenta de que quien esta jugando con los sentimientos de los demás eres tu, lloras, caes en una crisis peor, te reencuentras y cuando al final entiendes de que no saber que puede pasar se trata el amor vas y quieres recuperar lo que tu mismo arrabataste de ti, pero es muy tarde, lo ves, esta feliz, ya tiene otra persona en su vida y al parecer todo vestigio de ti a desaparecido, y no te queda más remedio que seguir con tu camino, te llevas una lección de vida, pero estás obligado a dejar tu amor...

Y te quedan dos caminos, aprender de esa lección y continuar con tu vida o sumergirte en tu mundo de sombras y escapar del amor de una locura desesperada.

Delirios Místicos De La MenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora