TENTACIÓN ~ Dr. Stone (Stanley X Senku X Xeno)

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Senku estaba masajeando suavemente su hinchado vientre mientras se encontraba sentado en su celda.

Hoy era su 6to día desde que había sido secuestrado por el reino de las "armas", decidió llamarlo así debido a que Maya le había comentado que el jefe se especializaba y centraba en crearles armas de fuego y combate.

Senku comenzaba a sospechar que era alguien que ansiaba mucho poder y que estaba decidido a conseguirlo por medio de la violencia y el sometimiento.
No creía estar equivocado en cuanto eso después de haber conocido a Stanley, el alfa daba la sensación de ser realmente un asesino.

Y eso no era algo que le agradara, su instinto le decía cada día que tenía que alejarse de ahí. Quien sabe que tipos de alfas o sujetos estaban dentro del reino y pudieran ponerlo en peligro a él y a su cachorro, pero igual tenía curiosidad de salir y ver todo lo que habían logrado avanzar con respecto a la ciencia.

Agradecía que Maya fuera la asignada a vigilarlo, la alfa no le contaba mucho sobre los integrantes del reino o el nombre de su jefe y Senku sabía que incluso si preguntaba ella no le diría nada.
Pero estaba bien mientras tanto, se sentía cómodo con la presencia de la mujer, le había ayudado a ocultar su olor y también se había mostrado muy apegada y protectora desde que le había dicho que estaba cargando con un cachorro.

Le había traído otra manta e inclusive robo algunos alimentos variados para darle.

" Necesitas comer muchas más cosas para que tu cachorro este sano… ¡Al diablo con que eres un prisionero que solo debe comer sopa!"

La alfa le había sonreído ruidosamente al decirle eso.

Pensó en Ryuusui y los demás.

- Me pregunto si estarán planeando algo - Senku froto círculos suavemente en su pequeña panza redonda.
-Es más seguro que si, al diez mil millones por ciento.

El Omega comenzaba a sentirse tan dividido en sus pensamientos.

Le mortificaba aceptar que por una parte le gustaba estar aquí porque se sentía aliviado de no tener que estar cerca de Tsukasa.

Odiaba verlo y que siempre estuviera detrás de él obligandolo a aceptar sus feromonas y perfumando su nido.

Tsukasa olía a Canela y chocolate amargo.
Cuando Senku se sentía atraído platónicamente por el alfa, le gustaba su olor y le hacía sentir seguro.

Pero ahora el olor a canela del alfa solo hacia que le pícara la nariz y la garganta.

Tsukasa entraba a su cuarto en las noches  y le sometía con sus feromonas para obligarlo a estar sumiso mientras lo subía a su regazo y lamía la cicatriz de su marca de reclamo fallida para después acariciar su hinchado vientre.
El alfa siempre parecía asquerosamente orgulloso de haber dejado a Senku cargando con su cachorro.

Le susurraba al oido que se veía hermosa y que no podía esperar para que entrara en su segundo celo durante su 4to mes de embarazo para poder anudarlo con su vientre redondo y bonito.

Senku sentía ganas de llorar cada vez que se lo decía.

Durante su primer  mes de embarazo el Omega había entrado en celo, pero debido a que aún lloraba cuando estaba solo con Tsukasa, sus amigos declararon que no dejarían que el alfa se acercará a Senku, ya que era peligroso no solo para su salud sino que Tsukasa podía lastimar su útero y eso haría que perdiera al bebé.

Esa fue la única manera en que pudieron convencerlo de no acercarcele y solo perfumara a Senku para que pudiera aguantar el calor, después de todo no importaba que tanto Senku lo odiara, las feromonas de Tsukasa serían las únicas en ayudarlo debido a que era el padre de su cachorro.