Bajamos al Spa y hay apenas dos personas en su interior, Son de avanzada edad, no logro averiguar los años que tiene pero supongo que tienen que tienen que tener entre sesenta y cinco y setenta años.
Luke no se lo piensa ni un segundo y se mete rápidamente en su interior.
-Vamos Mía, está calentita -me dice con el pelo mojado y pegado a la cara. El agua provoca que cambie de color a uno mas oscuro.
De siempre y nunca lo negaré me ha costado meterme en el agua y esta no iba a ser una excepción.
-Voy ya -respondo tocando el agua con la punta del dedo del pie.
-Venga... que no muerde -se ríe mientras me salpica.
-¿Eres tonto o que? -manifiesto con una voz inocente.
-No, mi médico ha dicho que soy normal, que la estupidez viene de serie como el gps del coche -consigue sacarme una sonrisa, he de reconocer que es estupido pero me hace reir.
Después de pasar dentro un buen rato y tener la piel igual que aquellas dos personas que hace rato se salieron. Tomamos la misma decisión de salirnos.
Justo delante de la piscina se encuentran unas hamacas bastante cómodas.
-¿Te puedo hacer una pregunta? -me pregunta.
Algo que me pilla totalmente por sorpresa.
- "¿Tu preguntando algo?" -algo que pienso pero decido no decir.
-Si claro... dispara -escucho atentamente lo que puede salir de su boca casi perfecta.
-¿Cual es tu mayor sueño? -es una pregunta que nunca me había hecho directamente.
-Supongo que casarme y formar una familia -le respondo rápidamente un tópico tan grande como real.
-Me refiero a ir a algún país... ciudad... montar en algo... o probar algo que no hayas hecho nunca -parece tener curiosidad por mis inquietudes.
-Me gustaría montar en globo aerostático -le respondo revelando un sueño que llevo guardado desde hace mucho tiempo.
Luke se queda pensativo -. A mí me gustaría ir a todos los parques de atracciones del mundo, del menos emocionante al más, empezando por todos los estados de aquí y terminando por las tierras más alejadas -parece que lo tiene bastante pensando y que no es una idea de ahora.
-Pero tú tienes dinero, puedes ir a donde quieras -le respondo inocentemente.
-¿Sabes que el dinero no da la felicidad verdad? -responde cambiando completamente el tono de voz.
-Además que antes nunca había tenido a alguien que me acompañara -sus palabras son sinceras.
-Lo siento -me pide disculpas mirando hacia el suelo.
-Vamonos a la habitación -se levanta y comienza a andar sin darse la vuelta para esperarme. Me quedo perpleja sin entender si he dicho algo malo.
-¿Se puede saber lo que he dicho? -le pregunto mientras lo alcanzó a gran velocidad pero no consigo detenerlo.
-¿Qué os pasa a todo el mundo? pensáis que por tener dinero ya lo tienes todo y no es así Mía, no es así... -se reafirma en sus palabras y aprieta cada vez más el puño, se que no me va a pegar pero no puedo evitar sentir miedo.
Luke se da la vuelta y me quedo en medio asimilando todas las palabras que habían entrado dentro de mi como puñales.
Me niego a entrar en la habitación. Viendo el enfado seguro que está llena de oído del pasado de Luke Johnson. Así que dispuesta a darle unos minutos para que se le pase el cabreo decido irme a darme un masaje para desconectar y así olvidar aquellas palabras hirientes.
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Luces y sombras[©]
RomanceMia Miller, una chica sin ataduras y sin apenas responsabilidades prueba a ir a una sala de citas de su amiga Elizabeth, allí conoce a Luke. Un chico apuesto por el que le llevará a más de un quebradero de cabeza. Pero no podrá dejar de pensar en él...