⚜4⚜

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Sonic

- Debes aprender a controlar tus impulsos

- Controlarme... Si claro... Puedo controlarme... Puedo controlarme miestras observo como tomó de manera agresiva a mi amigo.

Mi vista se enfocaba exactamente en aquel sofa, ese sofa, en fonde yo los había visto tan cercas, el con esa tipica mirada amenazante que hacía temblar a mi amigo, lo que era un convivió de bienvenida, término en un autentico desastre. No sabia en verdad que era tan terrible, ¿ mi rostro con moretones y mi labio partido sangrando ?, o ¿ la casa de amy que parecía haber ocurrido un saqueó ?

- Sonic en verdad... ¿ cuándo dejaras de proteger a Tails ?

- Oh Amy... No me vengas de nuevo con eso.

Me quejé irritado por lo mismo, hace dias que Amy no paraba de molestarme con el mismo tema.

- ¡Es que es en serio Sonic!
En las batallas con Eggman no para de gritar:
¡Sonic!... ¡oh Sonic!, !AYUDAME! cuando esta en aprietos. Y como siempre, ¡¡vas tu a salvarle el trasero!!

Cubrí mis oidos, estaba tan irritado que no podía soportarla, la esquivaria si no fuera por que no me gusta ser grosero con las damas, pero estaba haciendo a que lleguara a mi límite. Su voz era molesta e irritante. Me molesté aún mas en cuanto empezó casi a imitar la voz de Tails en lo último.

- Lo hago porque es mi amigo

- ¡Eso no tiene nada que ver!

- ¡Tambien Lo Hago Porque Es Menor De Edad!

- ¿¡Y ESO QUÉ!?

- Y POR QUE ES MI DEBER... COMO HÉROE DE MÖBIUS, ES MI DEBER SALVAR A TODOS, INCLUYENDO A QUIENES ESTAN EN MI EQUIPO.
ESO INCLUYE A TAILS.

- ¡ES UN INÚTIL QUE NO SE SABE DEFENDER!

Lo ultimo fue la gota que derramó él vaso. Me quedé callado tan solo por un momento.

- ¿ Como tú?
¿ Qué tuvo que esperar para que alguien le rescatara de Metal?

Pareció haber funcionado, la mirada llena de rabia de Amy fue esfumándose poco a poco hasta que se lubricaron, parecia querer romper en llanto, me sentí victorioso por lo que había logrado. Pero cuando la vi llorar... Amy salio corriendo a toda prisa a una direccion que suponía era su habitación. El remordimiento fue inmediato... Pero no había nada que pudiera hacer... Ya estaba hecho, y no había forma de repararlo.

Pero tampoco estaba dispuesto a que siguiera insultado de tal forma a Tails. Amy no conoce el pasado de ese zorro alegre y de ojos tan azules, quizas si lo supiera, seria diferente y quizas... tan solo lo entendería. Pero por otra parte, no quiero que se entere. No soportaría que Amy tomé ventaja de esa información en su contra y que termine dañándolo aun más.

Tails a tenido la suficiente confianza para contarme de lo que piensa de si mismo, es duro y doloroso el llevar en mi mente... Que ese pequeño Zorrito que se ve tan alegre y que nada lo detiene... Piense también cosas tan terribles de si mismo.

Es duro, cruel e injusto.

Frote mi rostro dejándome caer sobre el sofá desganado, mire a la puerta y la minima idea de saber que Tails se encontraba ahí afuera llorando o con... ¡Shadow!... Me hacia hervir la sangre, le daría otro puñetazo si fuera lo último.

Me levante, acomode tan solo un poco las púas y salí corriendo a la velocidad que me permitían las piernas. Esperaba encontrarlo en su taller.

Al llegar... Toque mil veces la puerta, al no obtener respuesta, descarte la idea de que estuviera ahí. Busque por las zonas que acostumbraba en Green Gills, al no hallar pistas de su nave, tambien lo descarte. Opté por buscarle por las costas. De nuevo corrí a la velocidad a la que siempre acostumbro. Sentí mi corazón palpitar alegré al verle a la distancia.

Mi corazón se partio y la sangre me hirvió al no verle sólo y en compañia de ese molesto Erizo cercas suyo, mas aún viéndolo llorar y que ese farzante fuese quien le consolaba.

No se porqué...

Pero simplemente....
No quiero verle cercas de ese Erizo.

No soy Quien Tu creesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora