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—Está embarazada. —Dijo Garrett.

Ashton sintió la bilis trepar su garganta.

—Y alega que es tuyo, —Continuó Garrett. —que es mi nieto. Que es nuestro futuro Alfa.

Ashton notó como Froy se tensó, garras crecieron de la punta de sus dedos. Los ancianos comenzaron a hablar por lo bajo, repudiando lo que estaba sucediendo.

—Está mintiendo. —Dijo Froy. —Siempre uso protección, ella debió involucrarse con alguien más.

La loba detrás de Ashton gimió y Ashton se volvió a verla. Ella temblaba, su madre la sostenía, protectora, parecía dispuesta a atacar a quien se atreviera a acercarse a ellas.

—Nyla dice que antes de ti no estuvo con nadie, y tampoco lo hizo después. —Explicó Garrett.

Froy negó en un movimiento de cabeza. Sonreía, pero Ashton lo conocía, nada de esto le resultaba gracioso.

— ¿Y le crees? —preguntó.

Garrett se tensó frente a la falta de respeto de su hijo; pero Froy lo miró impasible, para él fue insultante que cuestionaran sus acciones, de modo que respondió con el mismo grado de ofensa.

La tensión duró el instante que le llevó a Garrett comprender. Su hijo era un Alfa al igual que él, cuestionar sus acciones era cuestionar su liderazgo y capacidad. Cuando volvió a hablar, lo hizo desde una serenidad rígida. Pero Ashton no lo pudo oír, su cabeza pulsaba y había un sonido disonante latiendo en sus oídos.

Se volvió a la loba, ella se estremeció al verlo. Cuando Ashton avanzó en su dirección, Nyla se inquietó, presuntamente intentado alejarse, pero Ashton no podría decirlo, su madre la sostenía ferozmente contra ella evitando que se moviera.

— ¿Qué quieres? —le dijo, sonando amenazante.

Ashton adivinaba que detrás de sus labios pulcramente pintados había filosos dientes de lobo.

—Enséñame tu vientre. —Le dijo Ashton.

Ella comenzó a negarse, quizás pensando que Ashton los lastimaría.

—No dañaría al futuro Alfa. —Dijo Ashton. —ni a ningún inocente.

La loba lo miró un instante, como intentado verificar la veracidad de sus palabras.

—Esto es absurdo. —Dijo Froy. —ella está mintiendo, no es mío. Ashton no tiene que hacer esto.

La loba se encogió al ver que Froy se ponía de pie.

—Es la única forma que tenemos de verificarlo. —Dijo Garrett.

Ashton escuchó a Froy gruñirle a su padre. —No permitiré que expongas a Ashton a esto.

—Es mi brujo, hará lo que diga mientras siga siendo su Alfa. —Dijo Garrett, con dudosa serenidad.

Ashton ignoró la discusión que se desataba a sus espaldas y extendió una mano.

No era un brujo como Eliser, que sabría cosas más detalladas como el tiempo de gestación, o si tenía algún tipo de enfermedad. Pero al menos podía identificar lo básico, como si había otra vida allí, y si esta tenía esencia sobrenatural.

—Déjalo revisarte. —Dijo la madre a Nyla, luego se volvió a Ashton, viéndolo suplicante, implorando en silencio que no hiciera daño a su hija.

—No la lastimaré. —Prometió Ashton.

Entonces Nyla se enderezó, dejando que se expusiera su vientre. Ashton apoyó su mano sobre la piel plana. Parecía imposible que algo estuviera creciendo en un lugar tan delgado y estrecho.

Entre Nosotros DosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora