Entre Nosotros Dos

s i e t e

Cuando despierta siente a alguien rodeándole, un brazo surcando su cadera, un rostro en el espacio entre sus omóplatos. Sabe quién es sin verle, conoce el calor que irradia Froy, como se siente el peso de sus extremidades sobre él.

Ashton se incorpora e intenta abrir sus ojos pero estos se encuentran sellados, lleva sus manos a su rostro y nota que están cubiertos por vendajes. Su primer impulso es quitárselo, pero recuerda lo que pasó antes de desmallarse. Hubo mucho caos, gritos y confusión, los estaban atacando, asediando, de la misma forma que había ocurrido diez años atrás.

Recuerda haber expulsado bilis y sangre, el dolor insoportable, como consecuencia de usar magia externa, él no la aplicaba activamente, pero las barreras respondían al territorio y al ser atacadas la magia que habitaba en este usó a Ashton como canal para regenerarse de los daños.

Ashton inhala lentamente, él sabía el costo a pagar por usar más magia de la que disponía su cuerpo, usar una fuente externa causaba daños al médium, de allí lo prohibido de esta práctica.

Ashton sintió a Froy moverse, las sábanas susurraron en tanto se sentaba a su lado, él no dijo nada por un minuto, se limitó a extender una mano y trazar la mejilla de Ashton.

— ¿Cómo te sientes? —le preguntó, con la voz pastosa por el sueño.

—Cansado. —Dijo Ashton.

La verdad era que sus extremidades le pesaban, y se sentía sin fuerzas, el solo pensar en hacer algo ahora mismo le causaba fatiga.

—Entonces vamos a acostarnos. —Dijo Froy, fácil como si no los hubieran atacado de nuevo, como si las personas que lo llevaron y torturaron durante meses no hubieran vuelto.

Ashton aprieta los dientes, y su pecho se agita.

—Todos están bien. —intervino Froy, adivinando la línea de pensamiento de Ashton. Tenían eso. Sabían leerse aun sin estar oficialmente enlazados, por lo general un entendimiento así se alcanzaba con la mordida que Froy jamás le ofreció. Ashton estaba bien con eso. La mayor parte, al menos. Jamás pediría nada que no estuvieran dispuestos a darle.

—Las barreras permanecieron en su lugar. Firmes. Nos dio tiempo a posicionarnos y atacar. —Dijo Froy. —No muchos salieron, y quienes lo hicieron no se dañaron gravemente.

Ashton se sintió respirar de nuevo. No supo que estaba conteniendo el aire hasta que el alivio se asentó en su pecho.

—Repelimos el ataque principalmente desde adentro. —Continuó Froy. —Los superábamos en números y usamos armas, muchos de ellos murieron, sin embargo, ellos no huyeron, no hasta que divisamos y atacamos a sus brujas.

Ashton permaneció en silencio por unos minutos. Luego: —Liches. —Dijo. —Eran brujas Liches ¿verdad?

Las brujas Liche eran brujas que se daban a entidades oscuras a cambio de poder, y al igual que Ashton con sus ojos, esto las dañaba. Era magia externa pero de la peor clase, corrompía al usuario tanto mental como físicamente. El daño era tal que descomponía sus cuerpos en vida, y permanecían sin morir, manteniéndose vivos mediante la magia. Solo alcanzando la muerte definitiva tras destruir sus restos. Ashton solo sabía de ellas por libros y esperaba mantenerlo así.

—Lo eran. Tres en total. —Dijo Froy. —Quemamos una de ellas antes que huyeran. ¿Cómo lo supiste?

—Magia profana. —Dijo Ashton. —lo sentí antes de desmallarme.

Pasó unos minutos donde nadie habló, Ashton podría creer que estaba solo, si no lo supiera mejor.

— ¿Cuánto tiempo llevo fuera? —Preguntó Ashton con cautela.