𝐇𝐄𝐀𝐕𝐄𝐍 𝐀𝐍𝐃 𝐇𝐄𝐋𝐋 | El cielo y el infierno
no están tan lejos como yo pensaba.
˖˚˳⊹ pedidos cerrados.
˖˚˳⊹ editando, en proceso nuevamente.
˖˚˳⊹ gotōge, creador de los personajes
pertenecientes al anime y manga.
˖˚˳⊹ créditos a los...
- ̗̀ Regalo paraarale-chan ̖́‧ ¡Feliz navidad, espero te guste!.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Uzui es uno de los Pilares más difíciles de convencer respecto a la moda, que incluso lo llegaba a juntar con su trabajo como cazador de demonios.
Su Tsuguko, (N), es una de las personas que puede confirmar que Tengen no es como aparenta, es mucho más estricto y perfeccionista si se le llegase a conocer más a detalle. Por esa parte (N) no está del todo segura de sobrevivir ante las estrictas enseñanzas de su maestro, Uzui Tengen.
Casi siempre Uzui anda detrás de (N) diciéndole como debe de comportarse y que postura debe de poner a la hora de caminar o correr o ya sea sentarse. Sí que es demasiado estricto, pero eso lo hace único y... extravagante como diría.
── ¡Yo no quiero ir! ── exclamó tratando de soltarse del agarre del albino.
── No te estoy preguntando si quieres o no ir ── respondió el Pilar ── Terca.
Dijo para luego darle una palmada en su trasero haciendo que ella se sobresalte.
── ¡Déjeme ir!, No planeo ir con usted, he estado evitando ese tipo de lugares durante mi corta vida, viejo── comentó pataleando para que la dejara ir mientras las chicas de la finca mariposa trataban de que soltaran a su compañera de ojos azules y cabello azabache.
── ¿A quién llamas "viejo", niñata? ── cuestionó después de soltar a la azabache siendo agarrada por sus compañeras.
Después de aquel incidente e insistencia, ahora ella se encontraba aguantando la risa por el espectáculo que daba su maestro con aquel trío de cazadores problemáticos.
── Lo diré una vez más, ¡Yo soy Dios! ── repitió el Pilar apuntando a los tres cazadores jóvenes.
La chica que estaba detrás de él estaba aguantando la risa por las caras raras que el rubio ponía y los otros dos que le seguían la corriente.
── La casa de las glicinas está en el camino al distrito de las flores, nos prepararemos allí ── anunció el mayor ──Síganme.
Dijo para luego emprender camino junto con su alumna y los demás, pero los otros se quedaron atrás viendo como ambos avanzaban o mejor dicho, como el Pilar se llevaba a su alumna cargada en su hombro mientras que ella veía como los otros se quedaban atónitos ante la velocidad de su maestro
── Así que Dios de la extravagancia ── recordó la menor rió suave ── Cada día se le anda acordando cosas extrañas y... para nada extravagantes ── murmuró la chica estando en el hombro del albino siendo agarrada de las piernas para que no se cayera.
