Que gran error el no tener tiempo para estudiar, el poder hacer mil cosas pero no estudiar. Estudiar no significa terminar una carrera universitaria, o terminar otra carrera universitaria si ya tienes una, tampoco significa hacer un curso muy largo, o muy costoso. Estudiar puede ser tomarse el tiempo de leer un libro, una revista de negocios, un blog que hable de finanzas, ver un vídeo de un emprendedor que sea referente. Estudiar puede ser ir a una oficina amiga, y entender sus procesos todo un día, o visitar un taller a fin con tus objetivos y compartir técnicas. Estudiar puede ser intercambiar puntos de vista con emprendedores, estudiar puede ser escuchar un audiolibro, revisar los números de tu proyecto, leer la base de lo que era tu idea cuando nació y los resultados que está teniendo el día de hoy, para así planificar las metas que quieres alcanzar en un futuro. Estudiar es detenerte a entender lo que está pasando con tu idea, contigo, con tus socios, con tus proveedores, con la competencia, y/o con tus clientes.
Preguntas necesarias para saber si éste hábito es parte de ti:
¿Cuándo fue la última vez que leíste algo referente a tu campo? ¿Qué tan informado estás de las nuevas tendencias? ¿Hace cuánto tiempo fue la última vez que pasaste más de una hora revisando datos interesantes que pueden ayudarte con tu progreso? ¿Cuál fue el último curso que hiciste?
Planifica en cada una de tus semanas aprender algo, comenzar y terminar un curso, leer algún libro, escuchar algún audiolibro, revisar nuevos datos sobre tu nicho.
"El estudio siempre será la base y el secreto, es la fórmula mágica que tanto persiguen los EMPRENDEDORES."
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El EmPERDEDOR
Non-FictionEmprender no es para todos, eso no está en discusión. Pero si es posible emprender, y muchísimos empresarios ya lo han demostrado, así que hoy no vamos a hablar del éxito de empresas reconocidas que comenzaron, incluso, con menos recursos de los que...