La lista de compras es de las cosas favoritas de los nuevos empresarios, hacerla, y comprar cada artículo de la lista. En la mayoría de los casos no necesitan ni la mitad de las cosas que apuntan en la lista, así que crean una lista de vanidad, no de herramientas. Dependiendo del punto en el que te encuentres solo necesitas un cuaderno y un lápiz, luego, quizás un celular, con el tiempo un computador, pero no necesitas grandes cosas, créeme, solo tienes que prestar atención a las necesidades de tu proyecto, y no a tus caprichos. Cuando aprendes a simplificar la lista de compras, alcanzas los objetivos mucho más rápido, porque no pierdes ni tiempo ni dinero en una lista de artículos que no necesitas, y que al final del día van a retrasar todo tu progreso. Dependiendo de tu nicho vas a necesitar, quizás algún elemento especial, pero solo un par, no te exijas lo más costoso cuando apenas estás comenzando.
Preguntas necesarias para saber si éste hábito es parte de ti:
¿Tienes una lista de compras? ¿Cuántos artículos pendientes tienes en ella? ¿Cuántos son realmente necesarios? ¿Cuántos tienes ya entre las herramientas necesarias? ¿Con las herramientas que tienes hoy, puedes trabajar?
No te exijas tener lo que tiene la competencia, ni lo que tiene el mayor referente de tu nicho, aprende a exigirte solo lo que realmente necesitas para ofrecer un producto o servicio totalmente óptimo.
"No es con lo que llenas la habitación, es lo que vive en ella."
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El EmPERDEDOR
Non-FictionEmprender no es para todos, eso no está en discusión. Pero si es posible emprender, y muchísimos empresarios ya lo han demostrado, así que hoy no vamos a hablar del éxito de empresas reconocidas que comenzaron, incluso, con menos recursos de los que...