Epilogo

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Dios obra por caminos misteriosos. Cuando más sola me sentí, la vida y el destino me demostró lo equivocada que estaba. Aunque no fui bendecida ni tuve el privilegio de contar con unos buenos padres que lo dieran todo por mí, que me dedicaran así un fuese una minuto de su tiempo, descubrí a tiempo que me había salido de la ruta y que no llegaría muy lejos si continuaba con ese estilo de vida.

A raíz de esa larga travesía aprendí la lección; no vale la pena rogar o mendigar el amor y atención de nadie. Quien verdaderamente te ama y te quiere, te busca y te encuentra. Para mí fue difícil aceptarlo al principio, de hecho, todavía hoy vienen recuerdos de ellos a mi mente, pero no permito que tengan control de mí y de mis emociones.

Ese mal ejemplo y experiencia me ha servido para no ser como ellos, para esforzarme día tras día en dar lo mejor de mí por mi familia, por mis hermosos dos hijos y por Jensen.

Aprendí a elegir mis amistades. En estos tiempos los buenos amigos se encuentran con lupa, pero aun existen personas con buenos sentimientos e intenciones. Por fortuna, pude salir a tiempo del lado de esas toxicas y malas amigas del pasado.

Keyra está recibiendo ayuda por los problemas que ha enfrentado debido al vicio. Mientras que Stacy es madre soltera de tres hijos de diferentes padres. Todo esto lo supe en la reunión que organizaron mis excompañeros de clase, en la cual solo unos pocos asistieron. De las demás no he sabido nada, pero ojala hayan podido enderezar su vida.

Mi progenitor sigue viviendo su vida loca. Lo he visto pocas veces, pero ha sido lo suficiente para no olvidar cada detalle de la ocasión. Se le ve vagando por la calle con diferentes hombres y vestido de mujer, con largas uñas, trajes ajustados, maquillado y tacones altos. Esta es la vida que escogió, es la que lo hace genuinamente feliz.

Mi progenitora rehízo su vida con un hombre que en apariencia aparenta ser mucho menor que ella y con el que tuvo una niña. Se ve que es genuinamente feliz también al lado de su familia, donde yo nunca fui recibida o deseada. Ya no siento celos al recordar esa imagen de ella sonriendo y cargando a esa niña, en compañía de su nuevo amor, a pesar de saber que ella, probablemente está recibiendo lo que yo no nunca tuve; su interés, amor y atención.

Todo lo que ha ocurrido me ha servido para entender muchas cosas. Es probable que si mi padre y ella estuvieron juntos y fingían ser felices, era porque se sentía obligados al estar yo de por medio. Por eso, al ver la oportunidad de salir de mí, no lo pensaron dos veces para cada uno escoger su camino y luchar por la felicidad que se les fue arrebatada con mi llegada. Aunque no me arrepiento, eso fue lo que me llevó a los brazos de mi marido, a conocer lo que es el amor, a ser mejor persona, a sentir por primera vez lo que era sentirse amada, valorada y deseada.

Jensen; todavía mencionar su nombre me provoca un sinnúmero de sentimientos y emociones en mi pecho. Es maravilloso conocer la perfección en esos pequeños que nacieron del inmenso amor que hay entre los dos.

Nuestra relación está en su mejor momento, disfrutando plenamente de esta etapa tan maravillosa como lo es ser padres, dando lo mejor de los dos por ser el mejor de los ejemplos para nuestros pequeños.

No hay mejor privilegio que enamorarse de la misma persona cada segundo que transcurre, en cada gesto, palabra, mirada y acción. Sé que lo nuestro es para siempre; lo confirmo cada vez que nuestras miradas se encuentran y mi corazón late frenéticamente.

Deseo Reprimido [✓] [EN FÍSICO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora