ALWAYS YOU | THE WALKING DEAD GAME

XV. Short And Sweet

La rubia y el trigueño se dirigían nuevamente al Internado. Con un plan en mente, si todo salía bien con James, lograrían tener la mejor distracción para adentrarse al barco h salvar a sus amigos. Sin embargo, algo dentro de Anya le causaba algo de preocupación. El reencontrarse con Minerva, algo que pensó que la alegraría, solo le trajo un poco más de tristeza. Eventualmente, como a Anya se le notaba todo lo que sentía, fue cuestión de tiempo que Louis supiese que algo estaba mal con la chica.

— ¿Que sucede, cariño? —pregunto Louis acercándose un poco más a la chica, recostando uno de sus brazos alrededor del cuello de la chica— ¿En que piensas?

— Si nosotros vimos a Minerva, tenemos que asumir que Violet ahora mismo debe estar con ella dentro del barco. —analizó Anya guardando una de sus flechas en su bulto— ¿Sabes lo que eso significa, cierto?

— Pensaba lo mismo. —confesó bajando su mirada— ¿Crees que a Violet...?

— Claro que si. —interrumpió riendo un poco— Hasta hace poco seguía hablando de ella. Fue de lo primero que hablo con Clementine. Aunque ahora sea novia de Clementine, creo que Minerva aún le gusta.

— Con ella están Omar y Aasim, —recordó intentando ser algo positivo ante la situación— Ellos pueden hablar con Violet, no dejar que la manipulen.

— Puedo aceptarte eso de Aasim, —bromeó para luego dirigir su mirada a Louis— ¿Pero Omar? No puede disparar bien con el arco y flecha, le da pena matar a caminantes.

— Entonces, lo que estás diciendo es que... —dijo intentando hacer reír a la rubia— Estamos jodidos.

— Minerva ahora es como un soldado sin corazón. —dijo algo preocupada— Estoy segura que intentará manipular a Violet para que se rinda. —pensó para luego cerrar sus ojos con solo pensar en eso— Tenemos que sacarla de ahí. No podemos perder a más personas, no creo que pueda funcionar si perdemos a alguien más.

— Nadie va a perder a nadie, porque sacaremos a todos de ahí. —contesto deteniendo su caminar. Tomó a la rubia por sus mejillas para levantar su mirada— Ingeniaste un plan junto con Clementine, un plan perfecto. Sacaremos a nuestros amigos de ahí y volveremos aquí sanos y salvos.

— No se como eres tan optimista, da un poco de miedo. —bromeó riendo vagamente— Es un poco creepy a veces.

— Fue bendecido con el poder del optimismo. —dijo llevando sus manos a su cintura, posando como un héroe— Tú... fuiste, "maldecida" con el poder de la negatividad. Pero sabes lo que dicen a veces, —tomó por la cintura a la chica, y la acercó un poco a él— Polos opuestos se atraen.

— Basta, —río a carcajadas empujando al chico un poco— Eres un idiota.

— Si, bueno, tú quisiste estar con este idiota. —contesto robándole un beso a la chica— La del problema eres tú.

Para su sorpresa, la escuela estaba más de cerca de lo que habían pensando. Vieron como los protones se empezaban a asomar entre los árboles. Se sintieron salvos al ver que ya estaban en su hogar. Caminaron un poco más rápido y entraron a la misma. Fue una llegada extraña. Normalmente, estaban acostumbrados a llegar y ser recibidos con un poco de más personas. La rubia sintió que cada vez los niños eran muy pocos, el grupo empezó con muchos niños. Ahora, solo quedaban cinco. Eso sin contar a Clementine y AJ, ellos no habían estado con ellos al principio de todos. Fue algo triste, por unos momentos. Los chicos los recibieron, e hicieron muchas preguntas respecto al plan. Distrayendo un poco a Anya. La chica explicó con detalle todo el plan, quería que todos supiesen sus partes en el mismo. Tenía que ir todo tal como planeado si querían que sus amigos volviesen sanos y salvos.