Gaara x Naruto, Una Tragedia Milagrosa.

C-8

Caminaron hacia el hospital, pero Iruka sensei se detuvo abruptamente -¡Tengo que revisar los exámenes!

Naruto rio ante aquello, una risa breve -¡Me tengo que ir! Shikamaru cuida a Naruto.

-Ya que, vamos Naruto, ya casi llegamos al hospital- Naruto asintió y caminaron en silencio, hasta llegar a la habitación de Naruto.

-¿Puedes poner algo para que la puerta no se abra?- pidió Naruto.

-Podríamos poner un palo ¿Por qué?

-Es que necesito contarte algo, pero no quiero que nadie más escuché- Shikamaru asintió, hizo un par de cosas y ahora nadie podía abrir la puerta por fuera.

-Listo- Naruto asintió, Shikamaru se sentó frente a él.

-¿Qué me vas a contar Naru?

-Es sobre aquella noche... Pero me da miedo contártelo, si te lo digo te daré asco y te irás- Naruto miro al suelo y apretó su pantalón.

-Oye Naruto, ¿En serio crees que después de todo lo que ha pasado me iré?- Naruto asintió y Shikamaru suspiro pesadamente.

-Bien, si tú me cuentas yo te prometo no irme- lo decía con una voz tan tranquila y una sonrisa que nadie más había visto, Naruto se sentía en confianza, de pronto la voz de Kurama resonó en su mente.

«Hazlo cachorro, tienes que contarle» Naruto tomo aire y miro a los ojos de Shikamaru, había pasado tan solo tres semanas desde que regresó, no se sentía preparado para contar todo aquello; sin embargo, Naruto por más tonto que fuera sabía que aquella cosa que le inyectaron podría matarlo, lo había escuchado durante una sesión dónde quedó "inconsciente".

Suspiro pesadamente y mirando fijamente hacia el suelo comenzó a hablar en volumen bajo -El día que me atacaron en mi departamento yo me defendí, pero había más de los que creí, lo último que recuerdo de esa noche fue sentir un Kunai clavarse en mi brazo y después todo es borroso, un par de árboles, tipos vestidos de negro...

-¿Y después?- pregunto Shikamaru al ver que Naruto se había quedado viendo a la nada.

-Después aquel cuarto oscuro, había 2 lámparas a los costados de la cama que siempre tenía una colcha de color rojo como la sangre, los muros parecían de color azul oscuro y esa cadena que sujetaba mi tobillo estaba demasiado apretada, era lo suficientemente larga para que yo pudiera moverme por toda la cama pero no para poder bajar de ella por los costados.

-¿Una cama? ¿Por qué te tendrían en una...- Shikamaru comenzó a temer por como seguiría la historia.

-Él tiene unos ojos verdes con destellos negros, me veía con rabia, siempre me veía así, dolor, odio y algunas veces ¿Amor? No podía distinguir muy bien aquello.

-¿Sabes quién es él?- Naruto negó con la cabeza, junto a sus piernas, a su pecho y le hizo una seña a Shikamaru para qué se sentará junto a él, el Azabache hizo caso se sentó a un lado y Naruto recargo su cabeza en su hombro.

-Me llevaron todas las mañanas a la misma hora, a una sala de color blanco, me amarraban a una silla del mismo color y después...- Naruto se quedó callado por unos segundos.

-El dolor recorría todo mi cuerpo empezando por el brazo, se extendía por el pecho y así poco a poco, la primera semana quedaba inconsciente, perdí la cuenta de cuánto tiempo me inyectaron esa cosa, solo recuerdo el incesante dolor les pedí que se detuvieran exigí respuestas, pero nunca lo hicieron y nunca contestaron- Shikamaru creyó saber el porqué de sus sollozos cuando dormía, creyó que aquello había terminado, pero Naruto hablo antes de que él lo hiciera.