Camilo Madrigal Y Tu

capitulo 3

Camilo

Todo el día la gente del pueblo ha estado muy movida, si que se nota que los nuevos saben cómo hacerse notar, todo el día han estado recorriendo el pueblo, todavía no los he visto y tampoco es que me interese.

Mi abuela sigue muy estresada y revisa lo que mirabel ha hecho hasta ahora asegurándose de que todo este perfecto, también está presionando a mi tío bruno para que le haga una predicción y le diga que todo saldrá perfecto, él ya se lo ha confirmado mínimo 5 veces pero ella aún no está contenta.

-Ya vienen- dice dolores, como siempre nos das mucha ayuda hermanita.

-Que tan rápido? Aun no sé qué tipo de plantas poner para la decoración, creo que voy a poner unos cuantos cactus- Creo que Isabela va a terminar ocasionando un accidente con esas espinas.

Estoy mirando a todos a punto de colapsar cuando escucho el timbre, uy ya llegaron, la que abre es Maribel y los recibe con una gran sonrisa.

Yo estoy intentando verlos pero se me hace difícil porque mi familia está alrededor de ellos, al único que alcanzo a ver es a el padre el cual es bastante alto.

Me voy acercando poco a poco y, ah?, es un hombre?, ay, resulta que uno de los hijos de la familia es hombre , ya veo porqué nos confundimos con respeto a su sexo debido a que tiene una larga cabellera, que champú usara?, necesito saber la marca también quiero que mis rizos se vean así de bien.

Sigo mirando a el resto de la familia y veo a la madre con una chica a su lado la cual se ve unos cuantos años mayor que el chico de cabello largo.

Y por último veo a la integrante de la familia más bajita pero me quedo impresionado con su hermosura, tanto que me quedo como tonto mirándola, al parecer ella lo noto y se me queda mirando con una expresión de confusión.

-Oye- Isabela susurra para que nadie más escuche -Tienes la cabeza del bebe de los Pérez-ah?, es cierto ya entiendo la mirada rara de aquella chica, rápidamente vuelvo a mi forma natural y me sonrojo.

-Holaa, es un gusto tenerlos acá mi familia y yo preparamos todo para que estén a gusto y se sientan cómodos - Maribel está sudando de los nervios.

A continuación todo nos sentamos en la mesa y me toca ubicarme justo al frente la hija menor de esa familia.