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Narra Daniel:
- Dios disculpa no debería haber entrado sin preguntar - hablo y el chico del baño limpia su rostro con la palma de sus manos antes de levantar su mirada - ¿va todo bien?, ¿necesitas que avise a alguien?, lo mejor será que me marche y te deje aquí tranquilo arreglando tus problemas.
- No quiero que te vayas - susurra y yo sonrío cogiendo su mano - aunque tal vez seamos perfectos desconocidos ahora que estás conmigo no quiero te que vayas.
- Te observe ayer mientras peleabas con tu padre - informo mientras me siento a su lado - nadie sabe lo que va a pasar mañana, ni contigo ni mucho menos conmigo y no necesitamos saberlo para ser felices.
- ¿Me has estado espiando? - cuestiona haciendo una mueca graciosa y yo me encojo de hombros riendo - mañana tengo intención de hacer una fiesta por la noche y sería divertido que te pasarás.
- Quizás la noche me cambie - comento y él asiente con su cabeza mientras me observa - ni siquiera me vas a pedir un por qué, a lo mejor soy un hombre lobo y en tu fiesta termino devorando a todos los presentes.
- No tienes pinta de lobo - asegura y yo sonrío - ni siquiera de vampiro, como mucho serás capaz de convertirte en payaso querido desconocido.
- Daniel - respondo y él hace una mueca mirándome - quizás nos quedamos juntos por tiempo, así que deberías saber como me llamó.
- Max - se presenta y yo asiento con mi cabeza - nadie salvo tú me ha echo sentir de esta manera y no sé si eso debe asustarme o alegrarme.
- Me acabas de invitar a una fiesta, me parece que no estás muy asustado por mi persona.
Narra Max:
- Has venido - grito sonriendo antes de acercarme a Daniel haciéndome paso entre la multitud - ¿no decías que la noche te hacía cambiar intento de hombre lobo?
- Eso solo lo dije para que te dieras cuenta de que solo eres humanos, pero me sigues confirmando que lo tuyo no son las indirectas - responde mientras pasa sus brazos por encima de mis hombros y empieza a bailar conmigo - como cuando te dije que no necesitaba una razón, ni un por qué para asegurar que hay tanto que no podemos explicar solo quizás nos estemos ayudando a escapar el uno al otro.
- Quizas no sea para siempre, quizás seamos perfectos desconocidos, quizás nos vayamos y quizás me gusta quedarme mirando tus ojos - susurro y él hace una mueca al no terminar de entender lo que digo - vamos perfecto desconocido te llevaré a fuera que podamos hablar mejor.
- Sigues sin pillar las cosas - avisa y yo achino los ojos mientras lo observo - te he escuchado perfectamente bien a la primera Max.
- ¿Entonces? - pregunto antes de negar con mi cabeza - ¿se puede saber que buscas de mi?, ya te has dado cuenta de que no soy bueno cogiendo indirectas ni mensajes subliminales así que deja de mandarlos y dime que quieres de mi.
- Esto perfecto desconocido - añade antes de besarme y yo correspondo segundos después todavía desconcertado por lo que estaba pasando - quiero que dejes de ser alguien extraño para mi.
