El Diario Robado De Eileen Snape ☆🔮 [Severus Snape × Lectora] >Terminada<

~Reflejo~

...Cruzo como relámpago frente a la puerta, pero no bastó para que la Sra. Norris sintiera su presencia y como fiera salvaje se abalanzara contra el.
La cola escurridiza del pequeño ratón escapó entre las garras de la felina, provocando que esta chocase contra la pared.

El ladrón había cruzado el hueco de la pared con facilidad.

Maúllo con disgusto sacudiendo la cabeza e introduciendo una de sus patas delanteras para alcanzarlo. No lo logro, pues este había conseguido tranquilamente traspasar la pared, y dirigirse por la orilla oscura de esta, hacia lo que parecía ser la salida.

Filch la observaba disgustado sosteniendo el farol -¿Cómo se te ha podido escapar?- la gata se volteó y comenzó a maullar como si realmente estuviera entablando una conversación. -No es posible... ese hombre está muerto... ¡¿Que huele a humano?! ¿Estas segura? No debe ser uno... es un ratón, ellos andan por todos lados o puede ser de alguien, una mascota de los trabajadores- se quedó pensativo pues no le habían informado sobre mascotas en el lugar. La gata se acerco a él y volvió a maullar suavemente, el hombre abrió los ojos como plato, la levantó del suelo y casi corriendo salió del lugar en dirección al despacho de la nueva directora, McGonagall.

...

Una gran puerta yacía frente a él. No podía abrirla, así que se deslizó por debajo de esta saliendo totalmente del castillo y dirigiéndose a la hierba para recomponerse.
Respiró agitado, estiró su cuerpo y siguió caminando tranquilamente hasta llegar a unos árboles. Allí volvió a su forma original, hecho un vistazo a sus cosas >>Uf... están todas, eso estuvo más que cerca<< pensó mirando el castillo mientras se rascaba la nuca nervioso, tronó su cuello de cansancio.

En ese mismo instante su amigo lo observaba impaciente a unos cuantos metros de él, tras un árbol lo esperaba atento para hacerle cualquier seña de que estaba listo.
Y así lo hizo, a penas el otro volteó, movió sus manos con exageración. El ladrón camino con cuidado hacia él -¿Ya estás listo? ¿Llevas todo?- susurro mirando extrañado el maletín.

-Si si, ya llevo todo, pero al parecer tú si que llevas TODO- remarcó la palabra señalando la gran bolsa que estaba a su lado.
El pelirrojo se dedicó a sonreír triunfante mientras extendía su brazo y ambos desaparecían del lugar...

-Ay!... espera, dame un minuto- dijo recargando su mano en la pared tratando de no vomitar

-Como era de esperarse el ladrón no sirve para...- antes de continuar recibió un golpe con el maletín. Hizo una mueca de dolor y se sobó el brazo

-Sabes que esto no va conmigo. Pero es más rápido... ¡ahg! Mi estómago se revuelve, lo odio- dijo con asco recuperando la compostura y respirando profundo.

Tomándolo de los hombros, su amigo comenzó a decir dramáticamente -¡Tss! Vamos anímate... luego de esto iremos por hidromiel y comeremos caldos, lentejas... cerdo ahumado. ¡ufff! Ya casi puedo saborear esa grasienta grasita dorada-

-¡Podrías callarte!- lo empujó y levantando su dedo indice de forma amenazante le dijo -Me debes una cerveza de la otra vez, cuando casi tu hermana-

-Shhhshshhhh... no lo menciones hermano, te daré las cervezas que quieras- sonrío con pena - Vamos o al viejo le dará un ataque por esperar tanto- ambos rieron y caminaron por la solitaria acera hasta que uno de ellos interrumpió el silencio

-Ammm... Daniel, recordé que debía buscar algo, no esta muy lejos...-

-Bueno... te acompaño, no tengo problema- interrumpió con interés