Estamos hechos de las pequeñas partes de las personas que amamos, pedazos de los seres que nos dejan marcas, de las que aprendemos, que nos hacen mejor y a veces nos lastiman.
Pequeñas piezas que nos completan a lo largo de la vida, pero a veces esa...
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¿Estaba temblando? Claro que estaba temblando y no era de menos me había besado.
¡ME HABÍA BESADO!
Me fui a mi salón para tomar clase pero estaba solito desgraciadamente... o no hasta que llegó Harry con un cafesito para mi.
—Gracias —sonreí.
—No hay de que —me calmó— Jake me dijo que es tu favorito y además se nota que lo necesitas un poco.
—Soy muy obvio —susurré bebiendo mi café que era más leche que café.
—Yo digo que le gustas a Sofi —me sonrío encantador.
—¿En serio? Yo nunca le he gustado a nadie —dije nervioso.
Harry soltó una pequeña risita pero se calmó cuando se dió cuenta que hablaba en serio.
—Dean no sé si lo has notado pero eres un chico muy apuesto, le gustas a varias aunque no te des cuenta —mencionó— incluso creo que también le gustabas a Jake.
Ese si era un buen chiste.
—Nos amamos pero no de ese amor —aclaré— por cierto, gracias.
—¿Por qué? —preguntó confundido.
—Por quererlo —asentí— amarlo así como es, hacerlo mejor persona y no pedirle que se aleje de mi.
—Eso jamás —se negó— su relación es muy importante para él, y ambos sabemos qué el que lo hace mejor persona eres tú.
Sonreí feliz para darle un abrazo que se merecía bien.
Al acabar la clase no sabía que hacer pues en las demás no tendría a Harry.
—Iré a ver a Jake —me sonrió— crees que le guste mi playera.
Su playera decía "Vamos Jake" con brillantina y un pequeño martillito.
—La amará —asentí.
El chico sonrió victorioso para irse con una sonrisa, al acabar las clases pasé por Dani que ya me esperaba con mi hermanito comiendo su helado.
—¡Dean! —corrieron abrazarme.
—Hola pequeños —les devolví el abrazo.
—Dean yo quiero ir con ustedes —se quejó Cam.
—Lo se hermanito pero mamá y papá ya tienen un viaje planeado contigo —le recordé besando su frente— te cuidas y portas muy bien.
Cam asintió desganado abrazándome.
—Me cuidas a mi hermano Dani —se despidió abrazándolo.
—Claro que si Cami —lo abrazó de nuevo.
Sonreí, me despedí de Jeff que se llevó a mi hermano, tomé de la manita a Dani para subirlo en la silla de mi hermano.
