Siempre he sido un llorón.
Eso siempre lo he sabido, suelo ser sensible ante muchas cosas que han pasado en mi vida, y siempre me avergonzó llorar frente al resto de las personas, lo veía como un signo de debilidad, por supuesto, aquello era un pensamiento de un niño de cuatro años, ahora que soy un adolescente, comprendo que solamente soy alguien sensible ante el resto de las situaciones.
He llorado frente a cientos de personas bajo la lluvia que no tenía intenciones de detenerse hasta que yo volviera al lugar que traté de proteger, ahora entiendo bien que, a pesar de mi poder, esto no es algo que pueda resolver yo solo... Que no estoy solo.
El encuentro con las personas que alejé apresuradamente de mí para protegerlas fue un golpe demasiado fuerte para mí teniendo en cuenta lo sensible que soy, ver el rostro de las personas que salvé y pude ayudar hicieron agitar mi corazón, demostrándome que solamente por haber ayudado a alguien, ya he logrado mucho más de lo que creí.
Los ojos me pesan y no es para menos teniendo en cuenta que me he quedado dormido en la sala de los dormitorios después haber tomado un baño, me hubiese gustado más hablar con mis compañeros, pero el cansancio me cobró factura, así que no pude pelear contra eso, he regresado a la calidez que brinda un hogar, las cobijas de mi cama se sienten más cálidas y mi almohada es más cómoda de lo que recuerdo.
Las páginas que he escrito sobre mi amor siguen guardadas en uno de los cajones de mi escritorio, las leí de nuevo y me siento avergonzado por ello, sin embargo, ya agregué las demás páginas que escribí mientras estuve afuera que, si bien no son demasiadas, fueron mi escape del caos que me seguía por unos minutos.
Aún no puedo creer que el amor fue lo que me logró mantener en pie.
Estoy seguro que ese mismo amor también colaboró en que pudiera regresar a la U.A. con el resto de mis compañeros, estoy seguro de que aquel encuentro le sacó alguna lágrima y que también la hizo sonreír, si cierro los ojos, me la puedo imaginar con los ojos cristalinos mientras sonríe y su corazón siente paz después de haberla preocupado tanto por no saber que era lo que iba a ocurrir. Ya lo he dicho, pero yo también estaba aterrado de lo que me pudiera ocurrir, no quería decepcionar a nadie y quería proteger a todos, llegando al punto de que no me importaba que pasara conmigo si eso me aseguraba que el resto iba a estar a salvo.
Pero honestamente, aquello no es algo que quisiera que ocurriera, quiero seguir aquí, esforzándome y seguir creando experiencias con mis amigos quienes, a pesar de que les he revelado mi mayor secreto sobre el cómo conseguí este poder, tal vez siempre debí hacerle caso a ella, quien opinaba que, sin importar qué mis amigos seguirían a mi lado, porque no se volvieron mis amigos por mi poder... Sino por ser yo.
Es en estos momentos cuando me gusta cerrar mis ojos y perderme en mis pensamientos, porque esa es la única manera en que puedo evocarla a estar conmigo, aunque sé que siempre está.
Ella siempre está.
No voy a mencionar al traidor en esta historia, aquí no existe esa cosa, aquí solo ocurre el arco de la guerra y la salida de Izuku de la U.A.👍🏻
Quedan 4 capítulos✨
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Un libro sobre ti | [Izuku Midoriya × Lectora]
Fanfiction𝗨𝗻 𝗹𝗶𝗯𝗿𝗼 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝘁𝗶 | あなたについての本 «Me gustaría que estuvieras aquí conmigo, o yo allá contigo, o que estuviéramos juntos en cualquier lugar» -Mario Benedetti. Midoriya Izuku desconoce el momento que pasó, no sabe el momento prec...