Luisa Madrigal • [One-shots] 彡

[Amiga de la infancia]

___: ¿Estás de broma cierto?— le pregunté sin rodeos a la persona que amablemente me actualizó con las noticias del pueblo. Un tal Mariano Guzman.

Mariano: Nop, incluso le pediré matrimonio a una de las hijas Madrigal, lo más prontamente posible.— cruzó los codos y levantó su barbilla, mostrándose orgulloso ante lo último dicho.

___: Wow- alto ahí, vaquero. Me estás diciendo que durante estos pocos años que me fui... ¿Ya todos los Madrigal tienen sus dones?— exclamé sorprendida. Y vaya que lo estaba, no puedo creer que mis viejos amigos ya tengan sus tan deseados dones. Ya quiero visitarlos y decirles lo mucho que los extrañé.

Mariano: Todos... exceptuando la hija menor de Doña Julieta; Mirabel.

___: Vaya... ella se le veía muy emocionada de pequeña por su futuro don...— nunca habría imaginado que la pequeña Mirabel no obtendría su don, eso no tiene ningún sentido.— Hace rato mencionaste un dichoso compromiso, ¿Quién será la futura casada?— cuestioné interesada en el tema.

Mariano: Creo que deberías ir tú misma con la familia Madrigal para conocer un poco más de ello.—se escuchó que alguien a lo lejos lo llamaba—Un placer conocer a una vieja amiga de los Madrigal, si necesitas algo, ya sabes mi nombre.

___: Claro, un gusto también.— mire la hora en mi reloj de mano. Se hacía tarde.— Me tengo que ir, y al parecer tú igual. —me alejé unos metros para retomar el camino— ¡Nos vemos luego!—el tal Mariano levantó su mano de forma de despedida, acción que imite, para proceder a caminar a mi destino. La Casa Encanto.

Mientras caminaba entre el verde pasto, recordaba algunos momentos que tuve en el pueblo. Fue donde viví la mayor parte de mi infancia, fueron tiempos muy divertidos e inmemorables. Los Madrigal me contaban como parte de su familia. Ya que mis padres eran muy amigos de Doña Julieta y Don Agustín. Técnicamente me crié al lado de los niños Madrigal; Isabela, Dolores, Luisa, Mirabel, y Camilo.
Gracias a la explicación de Mariano, conozco de la existencia de un nuevo Madrigal, en mi caso claro, ya que no lo conozco. Y se llama Antonio, según en la breve actualización, Antonio recibió su don hace poco.

___: Diablos, como vuela el tiempo...—detuve mi andar al sentir un golpe en mi espalda— ¿Esta es una clase de "Toc toc, ¿quién es?" o que...— oh, solo era un burro. Acaricié levemente en su cabeza.— ¿qué haces por aquí, eh?—escuché unos fuertes pasos acercándose hacia nosotros, mientras al otro lado se escuchaba un llamado a lo lejos.

x: ¡Pequeño burrooo!—grito a lo lejano la persona. Vaya, no pude evitar pensar en Burro de la película de "Shrek". Reí ante ese pensamiento. Dejando de lado mis bromas, me acerqué a la misteriosa voz que gritaba por el burrito que se encontraba a mi lado. Voltee hacia el lado donde estaba el burrito, para dirigir mis palabras hacia el.

___: Felicidades, ya te encontraron de tu escap-... oh, ya no está.—regresé mi vista hacia al frente y noté que la persona que gritaba hace unos momentos ya estaba enfrente de mi visualización. Era una chica, con el cabello negro rizado, y unos ojos color avellana, acompañados con unos lentes verdes. A simple vista parece alguien muy simpática y optimista. Aunque me es familiar de alguna parte...

x: Hey, de pura casualidad, ¿No has visto a un burro corriendo por aquí? Si no lo encuentro pronto, mi hermana me matará.—explicó mientras se acomodaba sus lentes color verde.

___: De hecho, si. Hace algunos instantes estaba a mi lado, pero se fue tal cuál gallina asustada.—la persona decayó un poco ante lo ultimo dicho. La verdad me gustaría ayudarla.— Igual, si gustas... te puedo acompañar en la búsqueda del burrito.

x: ¿De verdad?—suspiró con alivio— Muchas gracias... —vaciló por unos instantes al no saber mi nombre.

___: Oh, claro. Me presento; Soy ___ ___. ¿Cuál es tu nombre?—pregunte para conocer a la misteriosa chica, y responder mi pequeña duda sobre el parentesco de esta persona con alguien que alguna vez conocí.