Capítulo 76

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Song Qing corrió a través de la lluvia, paso a paso, salpicando agua en todas direcciones.

No notaba las manchas de barro en las perneras de su pantalón, su paso no disminuyó ni un instante. La lluvia se deslizaba por el cuello desde su barbilla, tan fría como espuma de hielo, y un escalofrío le dejó sin aliento.

Contuvo la respiración hasta llegar a la puerta, y cuando miró hacia atrás por donde había venido, no había rastro del hombre, exhaló con fuerza y empujó la puerta, débil.

Cuando escuchó el ladrido del perro, el alma le volvió al cuerpo. Song Qing volvió a un lugar conocido, el pánico que había sentido antes desapareció y se calmó.

De repente, le pareció que el hombre le resultaba familiar. La luz y las sombras del callejón eran tenues, el hombre estaba a contraluz y llevaba una máscara, lo que dificulta verle la cara, pero algo le decía que había visto a este hombre antes.

Buscó en su mente una y otra vez, pero no pudo encontrar una figura similar en su memoria de casi un año. Song Qing tuvo que rendirse y guardó en silencio una nota mental.

El tiempo pasó como un caballo blanco, siete u ocho días pasaron en un santiamén, y en Chunling llovió durante una semana, a veces con tormenta, a veces con llovizna, según el humor de los dioses.

Después de ese día, Song Qing salió y prestó más atención, pero no volvió a cruzarse con esa persona, que parecía haberse evaporado.

Sin querer, se había topado con Shen Yuguan unas cuantas veces. No sé si era porque Shen Yuguan estaba envejeciendo o porque no se había recuperado adecuadamente, pero su rostro estaba tan demacrado como cuando llegó a Chunling.

Shen Yuguan no está seguro de cómo tratarlo, así que cuando lo ve, no es como un perro que ve un hueso de carne y se arroja sobre él, sino que sólo lo saluda ligeramente.

Si estaba dispuesto a quedarse, Shen Yuguan no renunciaría a la oportunidad de pasar tiempo con él, pero cuando mostraba que no quería hablar con él, Shen Yuguan se echaba atrás de forma consciente.

Por ejemplo, Song Qing aprovechó el raro buen tiempo para ir al mercado de abasto y hacer compras. El proceso de compra fue un placer, pero el resultado fue extremadamente agotador. Su mano derecha estaba llena de una bolsa de verduras y la izquierda sostenía una bolsa de 10 kg de comida para perros. Fue un paseo muy difícil.

Se dirigió a la entrada del mercado con una bolsa grande y otra pequeña. Le pilló desprevenido cuando chocó de frente con Shen Yuguan.

Shen Yuguan no encajaba en el ambiente del mercado. Es como una grulla blanca arrogante que accidentalmente entró en una granja de pollos caótica. Todos los ojos de las aves de corral estaban mirando involuntariamente a la figura orgullosa, pero la grulla blanca era solo una grulla blanca. Después de una ligera mirada, extendió sus alas y abandonó el territorio que no le pertenecía.

Por supuesto, antes de irse, Shen Yuguan también le preguntó a Song Qing si necesitaba ayuda; pero sin esperar su respuesta, los guardaespaldas, que estaban de pie de forma escalonada y tenían un ojo avizor, corrieron hacia él y le quitaron todo de las manos a Song Qing, con la actitud de "si no me lo dan, me echaré a llorar".

Song Qing no tuvo más remedio que agradecerle una y otra vez.

Durante todo el proceso, Shen Yuguan sólo le susurró que era una buena coincidencia, y luego, en el camino, Shen Yuguan no dijo otra palabra.

La luz del sol alargaba sus sombras y las proyectaba sobre las losas de piedra, parecía que caminaban uno al lado del otro, aferrados el uno al otro.

Shen Yuguan caminaba detrás de él cuando vio la escena. Se quedó boquiabierto durante medio segundo, luego sacó en silencio su teléfono móvil y se acercó unos pasos a la espalda de Song Qing..

Levantó un poco los labios y tomó una foto de sus sombras.

Con el clic, Song Qing miró hacia atrás con curiosidad, sólo para ver a Shen Yuguan mirando el teléfono, sonriendo suavemente.

Song Qing preguntó con sospecha: "¿A qué le estás tomando fotos?"

Shen Yuguan puso tranquilamente la foto como protector de pantalla, luego volvió a guardar el teléfono en su bolsillo, "El paisaje es bueno, solo tomaba una foto".

Song Qing gruñó y dejó de hablar, el tiempo que había estado despejado durante todo el día era de repente sombrío y no pudo evitar acelerar el paso.

Al acercarse a la puerta de la casa, Shen Yuguan de repente lo llamó, "Song Qing".

Él miró hacia atrás con vacilación.

Shen Yuguan sacó del bolsillo de su pantalón un muñeco de arcilla del tamaño de la palma de la mano. La muñeca estaba exquisitamente elaborada, incluso el pelo estaba cuidadosamente perfilado uno a uno. Con los ojos y la cara redondos, la muñeca era muy bonita. Era como si fuera una versión más pequeña de Song Yan.

Dijo con una mirada culpable: "No he sido un buen padre ni un solo día desde que Yan Yan nació, ni siquiera le he dado nada. He oído que el maestro de la ciudad hacía una bonita muñeca de arcilla, así que le pedí que hiciera una con la foto de Yan Yan,¿puedes dárselo de mi parte?"

La casa de Song Qing es un lugar prohibido para él, aunque sólo está a un muro de distancia, es un lugar donde quiere pisar pero no puede.

Song Qing no sentía mucho resentimiento hacia Shen Yuguan por decir que era el padre de Song Yan, después de todo Song Yan era de hecho, mitad de su sangre.

En cuanto a lo que Song Yan piensa de Shen Yuguan como su padre, tendrá que esperar hasta que crezca y entienda las cosas. Si ella está dispuesta a admitirlo, lo admitirá, pero si no está dispuesta a aceptarlo, él no interferirá.

Song Qing sacudió la cabeza: "La próxima vez que tengas la oportunidad de ver a Yan Yan, puedes dárselo tú mismo".

Aunque Song Yan es joven, es extremadamente sensible a los gustos y disgustos. Ya que Shen Yuguan se lo estaba regalando a Song Yan, era mejor que ella decidiera si quería el muñeco de arcilla o no.

Shen Yuguan no forzó el asunto y guardó suavemente el muñeco de arcilla:

"Adiós...espera...si, adiós."

Song Qing empujó la puerta, su voz giró en el aire y flotó al otro lado de la pared

"Adiós".

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Traducción: Yunno
Corrección: Ogalde

Señor, divorciémonos [ABO] (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora